El Estado de México se sumó ayer a la lista de entidades federativas que decidieron actuar antes que el Gobierno federal.

Los gobernadores que han tomado la decisión de cerrar establecimientos comerciales, iglesias, restaurantes, bares, etcétera, también anunciarán estímulos fiscales para las empresas, sin importar el tamaño.

En esto, también los gobernadores van a contracorriente del Gobierno federal.

Ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que no se apoyaría a las empresas sino a los “pobres’’, lo cual vende mucho pero resulta una contradicción que se medirá en pesos y centavos y en el número de trabajadores despedidos y empresas -de cualquier tamaño-, cerradas.

Si los gobernadores han visto la necesidad de apoyar a las empresas de su territorio prorrogando el pago de impuestos, ¿por qué a nivel federal no se puede hacer?

Una mala decisión de política fiscal en tiempos de crisis económica podría hacer más profunda la crisis que todo mundo ve venir y en la que el país ya se encuentra inmerso.

Hoy se espera que en la mañanera el Presidente haga una serie de anuncios drásticos para enfrentar la pandemia.

La gran incógnita es qué podrá cambiar de la estrategia -es un decir- desplegada hasta hoy.

Porque ha sido el propio Presidente el que ha ridiculizado y descalificado a “Susana Distancia’’ invitando a la gente a salir a restaurantes, a hacer su vida como si no pasara nada cuando todo está ocurriendo.
¿Estímulos fiscales? ¿Toque de queda a nivel nacional? ¿Pausa obligada de los sermones mañaneros?

Eso sí, las giras no se suspenden y como para que no haya dudas la Presidencia anunció que el domingo 29 el presidente estará de visita en Badiraguato, Sinaloa, la tierra del Chapo Guzmán.

¿Qué será, qué será?

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Imagine que usted, después de meses -o años- de buscar un lugar para construir su casa, por fin encuentra la ubicación ideal.

Obtiene sus permisos, se arregla con el sindicato y le da trabajo a los albañiles de la zona.

Pero unos vecinos se oponen  y lanzan una cruzada que el Gobierno hace suya, en lugar de aplicar la ley simplemente.

El presidente de la ciudad en cuestión le dice que sus vecinos no lo quieren pero que no se preocupe, que él le ayudará a ubicarse en otro lugar.

Total, terreno es lo que sobra.

Lo que falta es certeza jurídica.

No se trata de un pedazo de terreno, sino lo que jurídica y políticamente representa la decisión de cancelar la construcción de la cervecera Constellation Brands y la imagen del país.

Ni la operación cicatriz que anunció López Obrador servirán para recobrar la confianza perdida.

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Ricardo Monreal sigue porfiando para lograr un acuerdo con todos los coordinadores parlamentarios para suspender las sesiones debido a la emergencia sanitaria.

Hoy habrá sesión en el Senado; se espera que no se prolongue y que a la hora de la votación los senadores que acudan lo hagan en grupos de diez.

Pero el tema sigue siendo si los legisladores pueden trabajar a distancia por la emergencia o si de plano tendrán que acudir al menos a una sesión semanal.

Si está última fuera la decisión, entonces los senadores tendrían solo 4 sesiones más antes de cerrar el periodo ordinario.

Y dejarán para después de la crisis temas fundamentales como el outsourcing, la reelección, el uso lúdico de la mariguana y el juicio político contra Rosario Robles.