El Gobierno de la Ciudad de México destinará mil millones de pesos para mejorar el transporte público capitalino, así como otorgar un subsidio a los combustibles usados por los transportistas, con el objetivo de evitar un alza a la tarifa.

Andrés Lajous, titular de la Secretaría de Movilidad (Semovi) destacó que se ofrecerá un programa de renovación de unidades junto con el subsidio a la gasolina, bajo la premisa de que no aumentará la tarifa mientras no se mejoren las condiciones del servicio.

“Vamos a apoyar a la ciudadanía para no subir la tarifa a través de un subsidio al combustible. Entendemos que hay costos de operación, pero estos costos de operación no se le pueden transferir a la ciudadanía mientras no haya una mejora en el servicio”, aseguró el titular de la Semovi.

A cambio de los beneficios que el Gobierno ofrece, los transportistas deberán permitir la instalación de cámaras y GPS en sus unidades, ya que hasta el momento se han colocado en apenas 15% de los vehículos de transporte concesionado.

Además, la Semovi prepara una aplicación para celular enfocada en transporte de ruta para que los usuarios puedan compartir la información de su viaje a sus familiares o personas cercanas similar al módulo Mi Taxi de la App CDMX, para lo cual los conductores deberán estar registrados y con sus papeles en regla ante la ciudad, al igual que los taxistas.

Por otra parte, en colaboración con la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo (STyFE), el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la Secretaría de Finanzas, se desarrollará una estrategia para la profesionalización y el acceso a la salud de las personas operadoras de este modo de transporte.

Esta estrategia estará vinculada al sistema de registro de choferes para mejorar el monitoreo del servicio y volverlo más seguro para las personas usuarias y también para operadores, pues quienes cumplan con estos estándares de seguridad y calidad en el servicio serán quienes podrán acceder a los beneficios de profesionalización y de salud.

LEG