El ex presidente Enrique Peña Nieto puede ser llamado a comparecer ante las autoridades mexicanas por el caso de Emilio Lozoya Austin, ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex), pero tiene una implicación política, ya que el hecho de solicitar la presencia de un ex mandatario a rendir cuentas ocasionaría un proceso de inestabilidad política, consideró el politólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Edgar Ortiz Arellano.

“Más allá de lo legal hay una implicación política terrible y que también lo sabe Andrés Manuel López Obrador, por eso está renuente de juzgar a los ex presidentes no es que sea tan generoso, más bien empezar a hacer ese tipo de circunstancias pone a todo el sistema político en entredicho y ocasionaría una inestabilidad para el Estado Mexicano”, manifestó a 24 HORAS.

El 26 de junio Javier Coello Trejo, abogado de Emilio Lozoya, ex director de Pemex, comentó que tanto el ex presidente Enrique Peña Nieto, como el ex secretario de Hacienda, y Crédito Público (SHCP), Luis Videgaray, debería declarar como testigos en el asunto de la compra de Agronitrogenados por parte de la petrolera mexicana, ya que, dijo, Lozoya “no se mandaba solo”.

El 8 de julio el litigante anunció que interpondría un recurso de queja en contra de la negativa de la juez Luz María Tlapa para citar a comparecer al ex presidente y al ex secretario.

Lozoya, acusado por probables delitos de uso de recursos de procedencia ilícita, asociación delictuosa y cohecho, fue detenido el miércoles pasado en Málaga, España, y manifestó ante el juez que no aceptaba ser extraditado a México.

LEG