FOTO: REUTERS-ARCHIVO Mitch McConell, informó que su bancada aún no tiene votos suficientes para frenar la iniciativa demócrata de llamar a nuevos testigos a comparecer en el pleno  

El líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConell, informó que su bancada aún no tiene votos suficientes para frenar la iniciativa demócrata de llamar a nuevos testigos a comparecer en el pleno, durante el juicio político contra el presidente Donald Trump.

 

Durante una reunión de la Conferencia Republicana del Senado, celebrada después de que la defensa presentara los argumentos a favor del inquilino de la Casa Blanca, McConell informó a sus correligionarios que aún existe un voto dividido ante la posibilidad de escuchar más testimonios después de la etapa de preguntas y respuestas.

 

El senador republicano por el estado de Kentucky informó que hasta el momento no existe el compromiso de todos los miembros del grupo parlamentario para acelerar el “impeachment”.

 

Sin embargo, se mantiene optimista en que las negociaciones rendirán frutos para el final de la semana, cuando podría votarse la petición del Partido Demócrata.

 

El diario The New York Times reportó que algunos miembros del partido mayoritario se sienten presionados por la decisión que deberán tomar en los próximos días, pues primero deben evaluar cómo su voto en esta discusión y las que siguen al juicio político afectarán a los estados que representan.

 

El senador republicano por Dakota del Norte, Kevin Cramer, declaró a medios de comunicación después de la reunión de la SRC que “no son robots ni borregos, sino individuos que representan a sus estados” y añadió que “no hay legisladores débiles en el Senado estadounidense”.

 

John Cornyn, representante del Partido Republicano por Texas también emitió declaraciones después de la reunión y expresó que quienes están a favor de agilizar el proceso que actualmente los tiene inmersos en un largo debate están buscando que toda la bancada esté en la misma página durante las votaciones.

 

La solicitud demócrata de llamar a comparecer a más testigos ha estado sobre la mesa de debate desde las primeras sesiones del “impeachment”. No obstante, los republicanos habían mantenido la postura firme de frenar la iniciativa por considerarla innecesaria.

 

La jugada cambió esta semana tras el anuncio de un nuevo libro escrito por el ex asesor de Seguridad Nacional, John R. Bolton, donde el funcionario cuenta cómo fue testigo de la forma en que el presidente amenazó a las autoridades ucranianas con frenar apoyos militares si no iniciaban las investigaciones contra el ex vicepresidente Joe Biden. Este hecho sembró dudas en algunos miembros del partido.

 

El procedimiento aprobado por la cámara alta establece que, en caso de no llamar a más testigos, los senadores procederán con la votación que determinará si Donald Trump será destituido o permanecerá en su cargo para buscar la reelección en los comicios de 2020.

 

tfa