Callar a un político como Porfirio Muñoz Ledo no le hace bien a la Cuarta Transformación.

Lo sucedido en la Comisión Permanente, al no otorgarle la tribuna al diputado para manifestar su desacuerdo con la inoperancia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos en el tema de los migrantes centroamericanos, rompe con el discurso de que estamos en un nuevo régimen en donde las mujeres y los hombres libres pueden expresarse sin cortapisa alguna.

Recuerdo las intervenciones de Muñoz Ledo como senador, luego de las elecciones de 1988. Avasallaba a los adversarios con su discurso. Fue el primero en “interpelar” al presidente en turno, y ello le provocó hasta golpes de un legislador priista (si no mal recuerdo Xicoténcatl Leyva).

Que los miembros de MORENA en la Permanente le hayan negado la palabra a Muñoz Ledo, es una actitud que no tiene que ver con los principios de ese partido ni con la esencia del movimiento popular que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador: la libertad de los individuos, y no la opresión, para manifestar sus posturas políticas.

Al callar a Muñoz Ledo, los legisladores de MORENA actuaron con una ruindad política solo comparada con los legisladores levanta dedos del neoliberalismo. Se comportaron como aquellos legisladores que aprobaron el Pacto por México.

Yo estoy seguro que el presidente López Obrador lamentó la actuación de esos diputados y senadores de MORENA que cegaron la voz de un parlamentario.

No somos un partido de Estado”, les recriminó Porfirio, pero muchos legisladores, y militantes de MORENA, así lo conciben, creyendo que de esa forma logran la simpatía del presidente López Obrador y no hay nada más lejano que eso.

En el 2018, el Movimiento de Regeneración Nacional se convirtió en la fuerza política más importante de México. En el 2020, muchos de sus legisladores y dirigentes, están convirtiendo a MORENA en un espacio de confrontación, alimentado solo por las ansias del poder por el poder mismo.

Eso es una traición al presidente López Obrador y, aún más, a los 30 millones de electores que confiaron la dirección del país a quienes “no eran iguales” a los del PRIANRD.

Ya es tiempo de que los verdaderos aliados del Proyecto Alternativo de Nación tomen la decisión de participar en los asuntos de la vida pública. Bien decía López Obrador cuando afirmaba que dejar la política en manos de los políticos, era una irresponsabilidad.

La Letrina. El gobierno de Tamaulipas actúo de manera rápida y contundente en el caso –afortunadamente negativo- del probable contagio de coronavirus que se detectó en Reynosa. La autoridad sanitaria del país aprendió bien la lección de la crisis del AH1N1 que puso al mundo de cabeza.

 

     @Fercoca