Tras la victoria del Partido Conservador en las elecciones del jueves pasado, mismas que le dieron a Boris Johnson una mayoría de 365 (39 más de los que necesitaba), la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) antes del 31 de enero parece solo cuestión de tiempo.

Si asumimos la salida, ¿qué seguiría en el proceso del Brexit? Bajo dicho escenario, ahora tocaría negociar el acuerdo bilateral entre el Reino Unido y la UE. A este paso se le conoce como el “periodo de transición”, y se trata de un lapso entre el 31 de enero y el 31 de diciembre de 2020, para que ambas partes lleguen a un acuerdo comercial.

Bajo la ley británica actual, si no se llega a un acuerdo en dicho periodo, las negociaciones pueden, por mutuo acuerdo, ser extendidas hasta por dos años para dotar de tiempo suficiente a las partes y así evitar disrupciones en materia comercial.

Pero ayer todo esto cambió. En la Cámara de Comunes, el primer ministro anunció que, este viernes, su Gobierno presentará una modificación a la Ley de Salida (de la UE) para ilegalizar el seguir negociando un acuerdo bilateral después de 2020.

En otras palabras, Johnson quiere un mecanismo de presión a su Gobierno y al bloque para así evitar estancamientos en la futura negociación. Su plan es que, en no más de 11 meses (el “periodo de transición”), se logre el nuevo acuerdo para que, a partir de 2021, el Reino Unido goce de una relación comercial normal con Europa. Sin embargo, estos tratados suelen tardar años en construirse, por lo que podría resultar contraproducente para Johnson si la UE comienza con objeciones y condiciones.

En dicha sesión de la Cámara de Comunes, la primera desde la elección, el líder de la oposición, Jeremy Corbyn, aprovechó para felicitar al primer ministro por la victoria, pero le recordó que tendrá que cumplir con las “muchas, muchas promesas” que hizo al electorado en general, e incluso a los votantes laboristas. Johnson, quien agradeció el gesto, prometió buscar “puntos en común” y afirmó que su gobierno mantendrá un “espíritu nuevo y generoso”, después de la marcada polarización de los últimos años.

LEG