Los legisladores bolivianos se reunirán por la tarde de este miércoles para tratar de acordar una transición hacia las nuevas elecciones y calmar la violencia callejera que ha producido la muerte de 30 personas desde los cuestionados comicios del 20 de octubre.

Las dos cámaras del Congreso debatirán la anulación de la votación del 20 de octubre y la fecha para una nueva elección, luego de que el líder indigenista Evo Morales presentara este mes su renuncia bajo presión de las Fuerzas Armadas.

Bolivia, actualmente liderada por un Gobierno interino, se encuentra en una etapa de transición para reparar divisiones entre partidarios y opositores a Morales, quien gobernó el país por casi 14 años.

Morales renunció el 10 de noviembre presionado por manifestantes, grupos civiles, fuerzas de seguridad y aliados, así como por una auditoría internacional que encontró serias irregularidades en el recuento de los comicios y puso en duda la proclamada victoria del funcionario.

Desde entonces, un Gobierno interino de la exsenadora Jeanine Añez ha luchado para apaciguar la violencia extrema, pero avivó algunas divisiones con abruptos cambios respecto de las políticas de Morales, el primer presidente indígena del país.

En un comunicado, Añez dijo que el miércoles se presentaría un proyecto de ley para convocar a nuevas elecciones “como todo el país lo está demandando” y que sería a través de medios legales y constitucionales, salvo que los legisladores lo bloqueen.

“Hemos elaborado un proyecto base de ley. Probablemente pueda ser corregido, consensuado, enriquecido por todos los sectores que están involucrados en la lógica de pacificar el país y de elegir a nuestros gobernantes”, afirmó Añez. “Que elecciones va a haber en el país, sí, nosotros lo garantizamos”, añadió.

El conflicto en la región de Cochabamba y la ciudad de El Alto ha sacudido al país sudamericano durante la última semana desde la partida de Morales, con enfrentamientos por el bloqueo de una planta de gas que dejó el martes seis muertos.

Estas llevaron a 30 el número total de muertes en los disturbios tras las elecciones, según la Defensoría del Pueblo, la mayoría de ellas en los últimos 10 días.

En una conferencia de prensa, el ministro del Interior, Arturo Murillo, afirmó este miércoles que Morales seguía avivando los disturbios y les enseñó a los periodistas un video de una llamada telefónica que incluye un audio supuestamente de Morales en el que da órdenes para realizar bloqueos.

“Ese es Evo Morales haciendo terrorismo de Estado (…) En las próximas horas presentaremos una demanda internacional sobre esto”, dijo Murillo.

Desde México, Morales acusó al Gobierno interino de usar una fuerza excesiva contra manifestantes pacíficos. Mostró un video de bolivianos muertos con rostros ensangrentados, diciendo que habían sido baleados por soldados.

Morales ha expresado su deseo de regresar para terminar su mandato, hasta el 22 de enero, pero dijo que le comentaron que Estados Unidos no quería que retornara a Bolivia.

gac