Familiares y amigos de la ambientalista Irma Galindo Barrios de 36 años, denunciaron su desaparición a través de redes sociales.

La activista fue vista por última vez el pasado 10 de noviembre en el pueblo de Ndoyocoyo y después se retiró a su casa en Buena Vista Totoy.

Una de las teorías sobre la desaparición apunta que el hogar de Galindo se pudo haber incendiado porque guardaba cohetes para la próxima celebración de la Virgen de Guadalupe.

Otras versiones señalan que la promotora cultural había sido agredida anteriormente por talamontes locales por denunciar la tala clandestina ante la delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en Oaxaca.

El 27 de octubre, Irma denunció en Facebook ser víctima de hostigamiento y persecución por parte del presidente municipal de San Esteban Atatlahuca, Heriberto Nicanor Alvarado Galindo y el comisariado, Crescenciano Sandoval Quiroz.

En 2018, la activista presentó una denuncia ante la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) en Tlaxiaco, debido a que servidores públicos querían intimidarla, pero no hubo respuesta.

Los allegados de la defensora publicaron su fotografía en redes sociales para tratar de localizarla, aunque admitieron que por miedo no han acudido ante la Fiscalía General de Justicia del Estado.

 

CS