Un británico sospechoso de terrorismo fue detenido este jueves en el aeropuerto de Heathrow de esta capital a su llegada desde Turquía, tres días después de que Ankara comenzó a deportar a yihadistas extranjeros a sus países de origen, informó la Policía Metropolitana.

 

El hombre, de 26 años, fue arrestado bajo “sospecha de preparación de actos terroristas”, precisó el comando antiterrorista de la Policía Metropolitana de Londres en un comunicado, en el que agregó que ahora se encuentra bajo custodia policial y que la detención está relacionada con Siria.

 

La Policía Metropolitana no dio más detalles al respecto, salvo de que se enteró de la deportación cuando comenzaron a surgir noticias desde Turquía sobre el envío de yihadistas a diversos países, según el diario británico The Guardian.

 

Poco antes, Turquía aseguró que había deportado a ocho sospechosos del grupo extremista Estado Islámico (EI), incluido un británico y siete alemanes, como parte de sus planes de repatriar a yihadistas extranjeros detenidos en cárceles turcas.

 

El lunes pasado, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, comenzó a deportar a los extremistas que tiene en sus cárceles a sus respectivos países de origen, entre ellos un estadounidense y un alemán, al argumentar que Turquía no es “hotel de los yihadistas” y que sus gobiernos deben hacerse cargo de ellos.

 

Según el portavoz del Ministerio turco de Interior, Ismail Catakli, otros 23 presos yihadistas europeos serán deportados en los próximos días, entre ellos 11 franceses, nueve alemanes, dos irlandeses y un danés.

 

Alrededor de mil 200 miembros del EI se encuentran actualmente en centros de detención en Turquía, de los cuales al menos 737 tienen nacionalidad extranjera, además 287 yihadistas fueron capturados recientemente durante la ofensiva turca en el noreste de Siria.

 

PAL