El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) fortaleció las medidas de vigilancia fitosanitaria y sus regulaciones para productos de importación del tomate, para mantener en control al virus rugoso que afecta a este producto agrícola.

La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) fue quien anunció las acciones sanitarias que garantizarán a los socios comerciales que los tomates de exportación están libres de la plaga.

“Las acciones, implementadas desde hace más de un año, han permitido que la producción y exportación de tomate continúe en ascenso. México exportó durante el año pasado 1.6 millones toneladas de tomate fresco y 110 kilogramos de semillas de tomate, sin que se presentaran casos de presencia del virus”, destacó en un comunicado.

La dependencia recordó que en agosto del año pasado, derivado de la sintomatología en algunos puntos de producción de tomate, se tomaron 30 muestras en siete invernaderos de tomate y uno de bell pepper, en los municipios de Tanhuato y Yurécuaro, Michoacán.

Fue hasta el 10 de septiembre de ese mismo año que las diversas muestras colectadas de Yurécuaro tuvieron resultados positivos al virus, a lo que inmediatamente, el Senasica estableció medidas regulatorias para la importación de semillas, material in vitro, plantas, plántulas y esquejes de jitomate, chile y berenjena, para regular establecimientos de producción de material propagativo con microinjerto o injerto e instruyó medidas fitosanitarias de bioseguridad en campo a cielo abierto e invernaderos.

LEG