A tres días de que se anunció oficialmente la muerte de José José, parte de su familia asegura que no sabe dónde está el cuerpo y que sólo su hija Sarita sabe su ubicación.

Además, fuentes del Gobierno federal confirmaron para 24 HORAS que ofrecieron toda su ayuda para traer el cuerpo de el Príncipe de la Canción a tierra azteca. Han entablado contacto con la familia del cantante, menos con Sarita, quien no ha contestado sus llamadas.

Sarita desmintió que sus hermanos no supieran el paradero del artista. “Mi deber como hija y como hermana es avisarles lo que pasó con su papá. Ellos saben dónde está su papá. Hay pruebas de que saben dónde va a estar, que digan lo que quieran, pero nadie aquí está tratando de robarse la atención”, aseguró la hija más joven.

Durante la transmisión, la presentadora María Celeste aclaró que el cuerpo se encuentra “en un centro donde guardan a las personas que fallecen en lo que se determina cómo se realizarán sus funerales”.

El presidente de la Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados, Sergio Mayer, dijo que no se puede hablar de homenajes hasta que los hijos lleguen a un acuerdo.

“Ya Sarita dará a conocer en dónde tienen los restos, si lo van a cremar, repatriar el cuerpo o las cenizas, las autoridades de Relaciones Exteriores están al pendiente”, mencionó el también actor.

El yerno de José José, Yimmy Ortiz, publicó en su cuenta de Instagram un mensaje en el que asegura que el Príncipe será velado en México: “El funeral para una gran persona, padre y leyenda como lo fue José José toma tiempo para planear. No queremos, ni haremos algo apresurado. Él no sólo fue un príncipe, él fue y es nuestro rey. Nos está tomando tiempo para coordinar lo mejor (como se le merece) para nuestro ídolo. Su cuerpo está descansando en paz y así lo hará hasta el día de su velada. Nosotros no tenemos acceso al cuerpo.

Las leyes de Estados Unidos son muy estrictas. Desafortunadamente, ni su esposa puede ver el cuerpo. Pueblo de México, lo llevaremos a México para que puedan despedirse de él. Les garantizamos que lo podrán velar. Les pedimos perdón por el silencio, hemos pasado un tiempo tan difícil y no se lo deseamos a nadie. El dolor es inmenso para todos. Dios esté con nosotros y ¡Que viva el Príncipe!”.

 

LEG