Un estudio de muestras de heces de bebés descubrió diferencias clave entre los nacidos por vía vaginal y por cesárea, ofreciendo pistas sobre el desarrollo del sistema inmunológico humano, dijeron investigadores.

 

Los bebés nacidos por vía vaginal obtuvieron la mayoría de sus bacterias intestinales de la madre, pero los bebés por cesárea no lo hicieron y tenían más bacterias vinculadas al hospital que los rodeaba, mostró el estudio.

 

No está claro qué impacto puede tener esa diferencia en la salud futura de los niños, y los hallazgos no deberían disuadir a las mujeres de tener partos por cesárea, dijeron los científicos que lideran el trabajo.

 

Pero el llamado proyecto “Baby Biome“, el mayor estudio de ese tipo en el mundo, abre una ventana en una fase poco conocida en el desarrollo de la inmunidad humana, agregaron.

 

“Las primeras semanas de vida son una ventana crítica del desarrollo del sistema inmune del bebé, pero sabemos muy poco al respecto”, dijo Peter Brocklehurst, profesor de la Universidad de Birmingham, y codirector del estudio.

 

“Necesitamos hacer un seguimiento (…) de esos bebés a medida que crecen para ver si las diferencias tempranas en el microbioma provocan problemas de salud”.

 

El microbioma intestinal es un ecosistema complejo de millones de microbios y los científicos creen que es importante para el desarrollo del sistema inmune.

 

Investigaciones anteriores han sugerido que la falta de exposición a algunos microbios en la vida temprana está implicada en enfermedades autoinmunes como el asma, las alergias y la diabetes.

 

Pero los científicos aún no han podido determinar cuán importante es el microbioma intestinal inicial, o “bioma de bebé”, para la inmunidad y la salud futuras, cómo se desarrolla el microbioma de un infante o qué le sucede con los diferentes modos de nacimiento.

 

En el estudio, publicado en Nature, científicos del University College de Londres, el Instituto Wellcome Sanger y la Universidad de Birmingham utilizaron la secuenciación de ADN para analizar más de 1.600 muestras de bacterias intestinales de 175 madres y casi 600 bebés.

 

En muestras de madres y bebés de cuatro, siete y 21 días de edad, el equipo descubrió que había una diferencia significativa entre los dos métodos de parto: los bebés que nacen por vía vaginal tienen muchas más bacterias asociadas a la salud de sus madres que los nacidos por cesárea.

 

En lugar de algunas de las bacterias de la madre, los bebés de cesárea tenían más bacterias que normalmente se encuentran en los hospitales, dijeron los investigadores, y esos organismos eran también más propensos a ser resistentes a los medicamentos.

 

DAMG