Foto: Cuartoscuro / Archivo La Independencia es la máxima festividad patria, por lo que constituye un día feriado en México en el que ni la Bolsa de Valores trabaja  

Este lunes 16 de septiembre, las calles de la Ciudad de México lucen como muy pocas veces: sin tráfico, con pocos negocios en servicio y escaso flujo de personas.

 

Es un día de festejo patrio, en el que la tranquilidad y el silencio se imponen al estrés y el alboroto de un inicio de semana en la quinta megaurbe más poblada del mundo.

 

Por la Avenida Insurgentes, una de las más transitadas de la capital, circulan contados vehículos, mientras el tránsito es sumamente fluido sobre el Viaducto Miguel Alemán, vía rápida que atraviesa la zona central de la Ciudad.

 

La mañana de este día, en el que se festeja el 209 aniversario de la Independencia del país, solo dos puestos de tamales despacharon en las inmediaciones del Metro Chilpancingo, siendo la única opción de desayuno para las pocas personas que laboraron.

 

El dueño de los puestos, un hombre originario del Estado de México que porta lentes oscuros para ocultar los signos de la resaca, cuenta que tuvo que interrumpir su festejo a la 2:00 de la mañana para empezar a preparar, dos horas después, el champurrado y el atole de arroz para la vendimia.

 

Comenta, con resignación, que sus trabajadores lo dejaron solo, aunque un día antes le habían dicho que sí irían trabajar. Al final, tuvo que pedirle apoyo a su hermano, pero no se queja porque “gracias a Dios”, vendió todo lo que preparó.

 

La Independencia es la máxima festividad patria, por lo que constituye un día feriado en México en el que ni la Bolsa de Valores trabaja; también son suspendidas las actividades en escuelas, bancos y universidades.

 

Además, el 16 de septiembre se realizan festejos en la mayoría de las ciudades del país, incluida su capital, con honores a la bandera y desfiles.

 

MGL