Pese a que el Senado de la República reiteró ayer el exhorto que se hizo al Ejecutivo y a la dirección general del ISSSTE para que se pida la renuncia de José Manuel Mireles, subdelegado en Michoacán de esta institutición, por sus comentarios misóginos, el Presidente Andrés Manuel López Obrador se negó a “mandarlo al carajo”, como manifestaron los legisladores.

“Ya traté el tema hasta donde yo considero que se puede llegar”, dijo.

“Le pedí respetuosamente que él ofreciera una disculpa, tengo entendido que lo hizo, incluso está dispuesto a recibir información sobre cómo todos debemos de respetar a las mujeres. Yo soy partidario de la readaptación, del perdón”.

Indicó que todo humano tiene un error, y en todo caso es será el órgano de control del ISSSTE el que le establezca una sanción conforme a ley.

Ayer, senadores, incluidos los de Morena, pidieron que se mande “al carajo” al fundado de autodefensas en Michoacán, luego de que se refirió a las mujeres como “pirujas” y “nalguita”.

gac