Algún pudor y el hecho de que sea candidato a la Medalla Belisario Domínguez provocaron que Porfirio Muñoz Ledo renunciara a la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.
Ello no terminó con la crisis desatada por la intención de Morena de hacerse, un semestre más, de la presidencia en San Lázaro pasando incluso por encima de la ley vigente y de los acuerdos políticos.
El problema no era Porfirio, quien hizo una conducción muy aseada de los trabajos en la Cámara de Diputados, sino el agandalle de Morena.
Morena también quiso allanarse el camino y cambió su iniciativa por la del Partido Verde; la diferencia es que mientras Morena pretendía quedarse los tres años de la legislatura con la presidencia, la del Verde le concede un semestre más.
De esta manera Morena presidiría la Mesa 18 meses y el resto del tiempo se lo dividirían en partes iguales PAN, PRI y hasta el PT, que sumó ayer cinco diputados más para poder acceder al cargo.
La iniciativa no fue publicada en la Gaceta Oficial, y por lo tanto, la mayoría de los diputados no la conocían.
El la reunión de la Junta de Coordinación Política, los coordinadores firmaron su consentimiento para que se presentara dicha iniciativa pero no para que se discutiera ni se le exentara de los trámites legislativos, como quiso engañar Porfirio Muñoz Ledo.
Ante la inconformidad de la oposición por “esos detalles’’, Muñoz Ledo estaba a punto de llamar a un receso pero Dolores Padierna le dijo que no lo hiciera “porque nos van a tomar la tribuna’’.
Entonces se esperó ahí en la presidencia que le llegará la iniciativa y que fuera distribuida a todos los diputados.
Hasta las 19:30 horas seguía la discusión sobre la legalidad o no de este madruguete, sobre la proclividad de Morena a brincarse acuerdos y leyes, aunque esto no podía impedir que dicha iniciativa fuera votada y aprobada.
Pero hubo un cambio de forma, la renuncia de Porfirio, que puede ser el principio de la solución…si el resto de sus compañeros quieren.
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¡Pobres de los veracruzanos! Con un gobernador que no da una y con su segundo de abordo diciendo incoherencias, nomás no saben para dónde hacerse.
El muy juarista –así se define- secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, comparó la masacre de Coatzacoalcos, que ha cobrado la vida de 30 personas, con los inicios de ¡la Independencia de México!
Según el docto funcionario, cuando la sociedad impulsaba un cambio en el gobierno –en 1810-, grupos armados trataron de impedirlo.
O sea que su jefe, Cuitláhuac, es igual a Miguel Hidalgo.
No, pues sí ¿eh?
¿Qué castigo estarán pagando en Veracruz?
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Por cierto, el Congreso de ese estado “separó’’ –no quisieron utilizar el “destituyó’’-, al polémico fiscal general Jorge Winckler, a quien el gobernador Cuitláhuac García responsabiliza de todos los males.
Utilizando un legalismo –que no actualizó su examen de confianza-, sin que se conozcan los detalles de la votación en el Congreso, la mayoría de Morena, con ayuda de algunos legisladores del PRD y el PRI, se deshicieron del fiscal incómodo y nombraron en su lugar a una encargada de despacho.
Lo raro del asunto es que el madrugue…, perdón, la decisión del Congreso se tomó apenas unas horas después de que el fiscal y el gobernador sostuvieron una larga reunión en la que supuestamente habían pactado la paz.
LEG