Los gobiernos de Estados Unidos y México acordaron, luego de una reunión entre funcionarios del Buró Federal de Investigación (FBI) y de la Fiscalía General de la República (FGR), intercambiar información de sus respectivas pesquisas relacionadas con el ataque armado ocurrido el pasado 3 de agosto en El Paso, Texas,  y en el que asesinaron a ocho mexicanos e hirieron a otros seis.

En un comunicado, la cancillería agregó que estas acciones se darán con estricto apego a los marcos normativos de cada país, pues ambas naciones coincidieron en la necesidad de colaborar juntos, sin intervenir en sus jurisdicciones.

Así mismo, resaltaron la importancia de trabajar con las comunidades para prevenir crímenes de odio.

En el encuentro, que se llevó a cabo en la sede de la FGR, y  que fue presidido por el Fiscal Alejandro Gertz Manero, el Gobierno de México externó a las autoridades estadounidenses su preocupación por el acto cometido.

También manifestó su consternación por un posible vínculo del ejecutor del crimen con organizaciones supremacistas raciales y reiteró la importancia de llevar a cabo una investigación profunda de los hechos y de sus causas.

En tanto, la embajada estadounidense emitió un comentario en su cuenta en Twitter y en el que estableció que la reunión forma parte de las iniciativas continuas de intercambio de inteligencia entre México y EU, “de nuestra longeva cooperación en procuración de justicia con México, (…) similar a los acuerdos de intercambio de inteligencia bilaterales que tenemos con muchos otros países”.

“A la luz de los recientes eventos de El Paso, los temas de crímenes de odio y derechos civiles se agregaron a la agenda de esta reunión, que ya se tenía programada”, estableció.

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