Primera escena:
Durante la segunda quincena de mayo pasado, Jaime Bonilla y personeros suyos se citan con diputados locales de todos los partidos con una oferta:
-Medio millón de dólares a cambio de tu apoyo… Tú dices.
En el regateo, según la influencia de cada uno, la entrega sería mayor porque no es lo mismo un coordinador a un simple legislador.
¿Objetivo?
Ampliar el período de dos a cinco años del vencedor en las elecciones de junio, al frente de las cuales está el abanderado de Morena.
La negociación avanza tanto en el Congreso del Estado como en el Tribunal Electoral de Baja California, pero llega al Tribunal federal y todo se viene abajo.
Segunda escena:
El 30 de mayo, en Teléfono Rojo, damos a conocer esas maniobras pese a los dos reveses del Trife y advertimos que Bonilla no se resigna a ser minigobernador.
Concluimos la columna:
“… Pero lo será si no burla la ley como le recomiendan sus asesores.
“Todo es posible ya en este país bananero”.
DENUNCIA EXTORSIÓN Y VOTA A FAVOR
Tercera escena:
El 31 de mayo el presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, el priista Benjamín Gómez Macías, denuncia públicamente el operativo de corrupción de Jaime Bonilla y Morena.
-Me ofrecieron un millón de dólares.
¿Por qué?
Por agendar el tema, convocar al Congreso, discutir y votar para dar a Bonilla cinco o seis de Gobierno.
Gómez Macías se victimiza y responsabiliza al Gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador de cuanto pudiera pasarle por hacer la denuncia de este acto de corrupción de Bonilla y Morena.
Por eso promete presentar una denuncia penal, pero incumple.
Cuarta escena:
La elección del 2 de junio confirma las tendencias: el empresario Jaime Bonilla arrasa en la conquista de la gubernatura como Morena en el Congreso del Estado y los cinco municipios.
Quinta escena:
Durante todo junio siguen las negociaciones, y al fin diputados salientes sin futuro en sus depreciados partidos –PRI, PAN, PRD, MC- empiezan a titubear.
Todo se arma y el 9 de julio dan su voto para modificar la Constitución estatal a fin de entregar, contra el voto popular, la ley y la decisión del Trife, una gubernatura de cinco años a Bonilla y a Morena.
Sexta escena:
El presidente de aquella Mesa Directiva, Benjamín Gómez Macías, quien confesó la oferta de un millón de dólares por “jalar” con Bonilla y Morena, vota a favor.
¿Recibió el millón de dólares?
Los rumores hablan de mucho más, pero también llevan a otra pregunta periodística:
-¿Cuánto costaron los 21 votos del Congreso?
Con una acotación de suma trascendencia: esto se da en plena 4T y en pleno discurso lopezobradorista contra la corrupción.
BOLETAS PARA 3 CANDIDATOS REALES
La desorganización terminó por beneficiar al PRI.
Este fin de semana la Comisión Nacional de Procesos Internos mandará imprimir las boletas para la elección de dirigente nacional.
Su presidente Rubén Escajeda, al fin miembro de un partido sin reflejos, no sabía ni siquiera cuántos nombres incluir.
Hoy ya tiene tres candidatos reales a la presidencia: Alejandro Moreno Alito, la yucateca Ivonne Ortega y la veracruzana reivindicada Lorena Piñón.
Pronóstico: quedarán en ese orden.