La elegancia debe de estar presente en nuestro arreglo, puede ser que no seas no muy afecto a usar corbata todos los días por tus actividades o quizá los viernes de casual business quieres verte relajado, pero sin perder estilo.

Para dar un toque de elegancia tienes un accesorio que no debes de subestimar, que es el pañuelo de bolsillo.

Si buscamos en la historia, encontramos que los griegos fueron de los primeros en utilizarlos para cubrirse la nariz de olores desagradables.

 

Posteriormente en las cortes europeas regreso su uso en 1600.

A principios del siglo XX, los caballeros lo llevaban como elemental en su arreglo personal, el pañuelo blanco en el bolsillo del saco.

Un pañuelo puede hacer que le des un toque de elegancia y crear tu toque personal en el traje, que lo hará más elegante, o en un blazer para días más relajados sin perder ese toque de originalidad.

En primer lugar, debe saber que existen dos tipos de pañuelos, el de bolsillo es decorativo solamente y de texturas diversas. Cada uno debe ser en tamaño de 25 cm o 45 cm de forma cuadrada, con bordes hechos a mano de una forma tubular ligeramente irregulares con un acabado único, a no ser que sean imitados a máquina, lo que diferencia el precio y calidad.

 

El segundo es el pañuelo común de mayor tamaño que se usa para cuidado y limpieza del sudor o nariz, ese se lleva en un bolsillo del pantalón o en el interior del saco, solo cuida que no haga mucho bulto.

 

Texturas

Algodón

Es una fibra natural que puede ser de poco cuidado y fácil de lavar. Es más relajado, se pueden adaptar a formas rígidas y en diferentes colores para combinar, pero es excelente para tenerlo en el clásico blanco de etiqueta.

Lino

Es una tela muy versátil para su uso, muy elegante aunque su cuidado puede ser delicado, se arruga con facilidad y su lavado es mejor en seco.

Seda

Es un material ideal para realizar diferentes diseños, es delicada, suave y sedosa con una superficie brillante para atraer la atención en el bolsillo. Sus diseños por lo regular son estampados y existe una variedad muy amplia para cada gusto y estilo.

Es muy versátil y van bien con trajes completos o sacos sport. La desventaja es que no son recomendables para estilos doblados o de punta y sus cuidados suelen ser más delicados.

Lana

Son recomendables para época de invierno, son menos comunes, pero puedes probar en sus variaciones de alpaca, cachemira y pelo de camello, se lavan en seco y es delicada en sus cuidados.

También puedes encontrar pañuelos en texturas de fibras sintéticas o combinadas como el poliéster, son económicos, no se arrugan y sus cuidados son mínimos, aunque si queremos un accesorio que se distinga opta por los anteriores.

Colores

El color de tu pañuelo deberá de ser de acuerdo a tu vestuario, es como darle ese toque especial.

Evita que sea del mismo color de la corbata, a no ser que elijas un outfit monocromático en donde lleves toda la ropa del mismo color.

Si eres primerizo, experimenta con colores y texturas sólidas, por ejemplo, el blanco en una línea recta que sobresale de un centímetro a centímetro y medio de tu bolsillo.

Revisa que esté abierto y si está zurcido, retira la costura con mucho cuidado con unas tijeras de punta.

Mientras más oscuro es un color más formal resulta, a excepción del blanco, ya que este es el de mayor autoridad y se lleva en ocasiones de etiqueta.
A más ostentoso sea el diseño, más relajado será el mensaje que dé.

Evita llevar más de tres estampados o texturas diferentes en tu outfit

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