Her Safe Place busca aumentar la competitividad y productividad empresarial a partir de una visión incluyente de género. El primer proyecto a nivel mundial que pretende generar protocolos y procesos para desarrollar ambientes seguros para las mujeres a través de certificaciones que reconocen el punto de vista de las mujeres en sus instalaciones, procedimientos, cultura organizacional y de servicio.

“Esta certificación busca distinguir y destacar ambientes seguros para las mujeres, como una condición mínima necesaria para exponenciar el potencial humano, buscamos acompañar a las empresas para que logren generar protocolos de acción para así poder saber qué hacer en todo momento.”, declaró Paola Bortoluz, creadora de la organización.

“Al tú entrar a un negocio o empresa y ver este sello (Her Safe Place), el cliente puede entrar con la seguridad de que es un establecimiento que cuenta con gente calificada y protocolos de seguridad, en beneficio de los clientes y trabajadores.”

Una organización o establecimiento es distinguido y certificado cuando se logra una Cultura Colectiva, ésta se crea a partir del estudio, análisis e implementación de tres pilares fundamentales en la organización:

1. Instalaciones y Materiales

Inmuebles que integran en su diseño y construcción espacios que favorecen la seguridad y necesidades de todas las personas por igual: accesibilidad, iluminación, señalización, ventilación, así como dispositivos y equipos de vigilancia que brinden soporte al apoyo y uso correcto de los protocolos.

 

2. Espacios de Servicios Seguros

Busca promover procesos y protocolos de atención y prevención en caso de desastres naturales, accidentes dentro y fuera del lugar y sobre todo el estado de alarma y reacción en casos de inseguridad que alteren el ambiente seguro (acoso laboral, discriminación, acoso sexual, violación, robo, secuestro u homicidio).

 

3. Cultura Organizacional

Generar, a partir de protocolos avalados por las empresas, políticas de contratación, capacitación, permanencia y ascenso, condiciones generales de trabajo, dinámicas de convivencia en el marco de la igualdad de género, entre otras.

Bortoluz comentó que la creación de esta certificación nace de la necesidad de asegurar “la seguridad y el bienestar físico y psicosocial generado por la comunidad de colaboradores, clientes y visitantes de un establecimiento, que considera por igual las necesidades de mujeres y hombres.”

 

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada tres mujeres ha experimentado una situación de violencia, esto representa 35% de las mujeres en el mundo. En México, según Bortoluz, este dato se incrementa a siete de cada 10 mujeres, es por eso “que hay que trabajar en crear ambientes seguros para las mujeres, y al crearlos no solo ellas salen beneficiadas, sino toda aquella persona que trabaje o sea cliente de dicha empresa que sea certificada”

 

Paola Bortoluz se ha desarrollado en diferentes ámbitos, en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores a cargo de la dirección de Proyectos Bursátiles, como docente para materias de la Maestría de Políticas Públicas del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), experta en Análisis Regulatorio y consejera, desde hace cinco años, del Comité Directivo de Fundación Juconi, A.C., ONG experta en visibilizar, desarrollar, aplicar y compartir soluciones innovadoras para niñas, niños, jóvenes y sus familias afectadas por la violencia.

LEG