En una carta vista por Reuters enviada a la Federación de Fútbol Iraní (FFIRI), Infantino solicitó un plan que enumere las acciones que se tomarán para que las mujeres puedan comprar boletos para los encuentros de la clasificatoria, que comienza el 5 de septiembre.

 

“Si bien somos conscientes de los desafíos y sensibilidades culturales, debemos seguir progresando, no solo porque se lo debemos a las mujeres de todo el mundo, sino también porque tenemos la responsabilidad de hacerlo, según los principios más básicos establecido en los Estatutos de la FIFA”, escribió el martes Infantino al presidente de la FFIRI, Mehdi Taj.

 

“Le agradecería mucho que informara a la FIFA a la mayor brevedad posible, pero a más tardar el 15 de julio de 2019, sobre los pasos concretos que tanto la FFIRI como las autoridades estatales iraníes tomarán para garantizar que todos los iraníes y las mujeres extranjeras que lo deseen podrán comprar boletos y asistir a los partidos”, agregó.

 

Aunque las mujeres extranjeras han podido acceder de forma limitada a los partidos, a las iraníes se les ha prohibido entrar a los estadios cuando los equipos masculinos juegan desde la revolución islámica en 1979.

 

Había señales de que la situación estaba cambiando cuando a un grupo de mujeres se les permitió asistir a la final de la Liga de Campeones de Asia en Teherán en noviembre. Infantino estuvo presente en el estadio Azadi cuando Persépolis enfrentó al Kashima Antlers de Japón frente a más de 1.000 mujeres en una sección de las gradas designada como “familiar”.

 

Ese movimiento se produjo tras los esfuerzos concertados de grupos de presión tanto dentro como fuera de Irán, que fueron respaldados por jugadores de alto nivel y el exentrenador de la selección Carlos Queiroz.

 

Se esperaba que el avance, que se produjo después de que Infantino discutiera el tema con el presidente de Irán, Hassan Rouhani, condujera a nuevas concesiones sobre el tema en la conservadora nación islámica.

 

Sin embargo, a las mujeres se les ha negado el acceso a los partidos desde entonces. El amistoso de Irán contra Siria a principios de este mes es el último incidente en el que las mujeres fueron excluidas del Estadio Azadi y detenidas por las fuerzas de seguridad.

 

PAL