La Selección mexicana de futbol continuó con su serie de triunfos y su invicto desde que llegó a la dirección técnica Gerardo Martino. Lo cual sin duda nos deja un grato sabor de boca, que no impide un análisis y sobre todo, una comparación con el hombre que tuvo en sus manos el proceso anterior como fue el profe Osorio.

Y lo primero que hay que poner en la mesa es:

A Osorio lo terminamos matando por las “rotaciones” y a Martino luego de cuatro juegos, con diferentes alineaciones, con un número superior a los seis movimientos, no le cuestionamos los cambios y conste que los dos han tenido muy buenos arranques.

En lo particular, creo que es diferente la utilización de las palabras, cambio y rotación.

Osorio movió el equipo cada partido de acuerdo al rival, de acuerdo a lo que le podía hacer daño y de acuerdo a lo que dañaba al contrario.

Es decir, el colombiano ponía la alienación y el esquema de acuerdo a lo que él pensaba le hace daño al contrario y con base en eso ganar o sacar el mejor resultado posible.

Hoy vivimos algo distinto, el Tata busca con diferentes alineaciones encontrar su mejor equipo sin cambiar su esquema. Es decir, él privilegia su parado y su forma de jugar, al del rival.

Martino no se sale, hasta el momento, de su 4-5-1 y basado en eso busca a su cuadro titular. Sé perfectamente que ese esquema “madre” cambia de acuerdo a la posesión del balón, pero hasta ahora no cambia de acuerdo al rival como sucedió con Osorio.

Así, nos damos cuenta que no es lo mismo cambiar que rotar y seguro que Martino poco va a mover su cuadro titular en cuanto inicie la competencia. Porque habrá probado jugadores en un mismo esquema y sabe con quién puede ser mejor.

Pero este éxito, en mi forma de ver, no lo deja fuera de la polémica, porque les aseguro que estamos a punto de arrancar con el cuestionamiento a pesar de los resultados sobre porque Raúl Jiménez, el centro delantero titular no hace goles.

Y si falta Chícharo Hernández o si puede con la responsabilidad de ser el nueve.

Polémica que me parece absurda, pero que vende, este equipo ganó a Chile, Paraguay, Venezuela y Ecuador haciendo goles, la mayor parte de ellos de la gente que ocupa los espacios generados por los movimientos del único delantero.

Pero una Selección sin polémica no sirve. Así de fácil.

Por cierto la Sub-22 calificó a semifinales en Francia, sin jugar brillante, pero con tres partidos sin gol en contra, no puedo adivinar su futuro. Es verdad que la generación de juego y de resolver le cuesta trabajo, pero me deja tranquilo que los equipos se arman de atrás hacia el frente, y en este proceso parece que así es cómo están jugando y se requiere para ganar en semifinales mejorar en la definición, un viejo problema de nuestro futbol que ya tocaremos en otra oportunidad.