El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) publicó recientemente su Panorama del espectro radioeléctrico en México para servicios móviles de quinta generación, destacando algunas de las formas en que México puede unirse a la adopción mundial de la tecnología 5G. Muchos de los puntos de vista presentados están en línea con el consenso global sobre el uso del espectro para esta nueva clase de tecnología, pero una banda mencionada en el documento muestra cómo México está ignorando las tendencias internacionales en busca de una agenda que podría crear un abismo digital en México, frustrando los objetivos del presidente López Obrador de conectar a todo el país.

Esta banda, la llamada banda de 28 GHz, fue excluida explícitamente por los Gobiernos miembros de la agencia especializada de las Naciones Unidas, la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), encargada de decidir cómo se debería designar el espectro radioeléctrico para los servicios 5G en todo el mundo. De hecho, hace cuatro años, los Gobiernos, incluido México, después de extensos debates en la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones (CMR) de la UIT, decidieron no estudiar la banda de 28 GHz para 5G a favor de un total de 33 gigahercios de espectro en otras bandas. ¿La razón? La banda de 28 GHz ya está completamente utilizada por dos servicios críticos y existentes: enlaces fijos que brindan una importante conectividad punto a punto y servicios de banda ancha satelital, que pueden llegar a personas en cualquier parte del mundo. Ambos servicios se utilizan para conectar el móvil desconectado, y el móvil terrestre 5G es incompatible con los enlaces fijos y los servicios de banda ancha por satélite que también utilizan la banda de 28 GHz.

La comunidad mundial se reunirá nuevamente este año para discutir qué bandas identificar para 5G, entre otros temas importantes relacionados con el espectro. La banda de 28 GHz permanece fuera de la agenda de la CMR-19, y dado el importante uso de los servicios que ya la utilizan, es como debería ser.

El IFT cita un “impulso creciente” en su documento a favor de 5G en la banda de 28 GHz, y ciertamente algunos países han analizado el potencial de su uso. Sin embargo, en lugar de un consenso a favor de 5G, la tendencia es proteger la banda de 28 GHz. El documento de IFT supone que las economías de escala se materializarían en torno al uso de la banda de 28 GHz para 5G.

Los costos de ubicar 5G en la banda de 28 GHz serían demasiado altos para México. Mientras tanto, ya hay un amplio uso de los servicios de satélite y de enlace fijo en la banda. Éstas son claves para lograr la promesa del Gobierno de conectar a todos los mexicanos, en todas partes, y de cerrar la brecha digital del país, en particular respecto de áreas subatendidas tanto en comunidades rurales como en las urbanas. Esto, a su vez, podría llevar a un crecimiento del PIB adicional de al menos 6,6%, mucho más allá de la promesa de 5G. La comunidad global continúa impulsando el uso de banda ancha satelital de 28 GHz, no 5G. El IFT debe considerar esto.

* Juan José Díaz Infante es director de la Agencia Espacial Civil Mexicana, fundador de la escuela de Satélites ESAT y el Colectivo Espacial Mexicano.