Foto: Cuartoscuro La Arquidiócesis de México señaló que la emergencia por partículas PM2.5 en el Valle de México muestra “miopía” de la actual administración federal, por medidas como el recorte a instituciones que deben cuidar el medio ambiente  

Ante miopía del gobierno federal, la sociedad debe reaccionar ante crisis ambiental: Arquidiócesis

La Arquidiócesis Primada de México señaló que la emergencia ambiental que acabamos de vivir en la Ciudad de México y en la zona metropolitana ha sucedido muchas ocasiones, la cual es muestra que hay una crisis ética, cultural y de la miopía de la actual administración federal con la que está desarrollando su política ambiental recortando el presupuesto a instituciones que deben cuidar el medio ambiente.

“No podemos dejar de señalar la miopía con que la actual administración federal está desarrollando su política ambiental, no sólo recortando presupuesto en las instituciones que deben cuidar el medio ambiente, sino también en la insistencia de llevar adelante algunos programas energéticos y de infraestructura que van contra el más elemental respeto al equilibrio ecológico”.

En la editorial del semanario Desde la Fe de este domingo, titulada: El desastre ambiental es también desastre humanos. La iglesia católica menciona que el desastre ambiental es mucho más complejo y no lo vamos a solucionar con declaraciones ni buenas intenciones, y se trata de una problemática que estamos causando todos y debemos solucionar entre todos.

En este sentido, dice que no basta que como ciudadanos nos dediquemos simplemente a critica a las autoridades en turno, responsabilizarla de todos los ames, ni mucho menos que las autoridades anteriores acusen a las anteriores administraciones de negligencia para evadir su responsabilidad.
“El desastre es mucho más complejo y no lo vamos a solucionar con declaraciones ni buenas intenciones. Se trata de una problemática que estamos causando todos y debemos solucionar entre nosotros”, añade la editorial.

La Arquidiócesis refiere que mientras la realidad obligue a corregir las inadecuadas políticas públicas, esperando que no sea demasiado tarde, la sociedad debe reaccionar en lo que nos corresponde a todos.

“No sólo pensemos qué mundo vamos a dejar a nuestros hijos en el futuro inmediato, sino, lo más importante, desde nuestras familias, desde la Iglesia y la sociedad, pensemos cómo estamos formando a nuestros hijos para que construyan en el futuro un mundo mejor”, indicó la iglesia católica en México.

JMSJ