El presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró que en su gobierno los apoyos sociales se entregarán sin intermediarios, para evitar que lleguen incompletos, se den “moches” o “piquetes de ojos”.

 

Ello ante el reclamo de un grupo de integrantes de la organización identificada como Antorcha, que durante la asamblea comunitaria que encabezó el Jefe del Ejecutivo reclamó esa decisión.

 

Para contrarrestar la protesta, un grupo de personas se unieron al grito de: “Es un honor, estar con Obrador”.

 

 

El presidente agradeció el apoyo y dijo que “no es coreando, les agradezco mucho, porque aquí saben que es lo más importante del cambio, la toma de conciencia, el cambio de mentalidad de la gente. Ya no son ciudadanos imaginarios, son ciudadanos de verdad”.

 

Entonces “es muy sencillo. No hace falta gritar. Esta es una asamblea abierta, se invita a todos, vamos a preguntarle a la asamblea de manera democrática. Yo creo que la inconformidad es porque quieren que se siga entregando el apoyo a través de las organizaciones. ¿No es así?”, cuestionó.

 

En tal sentido, sometió a consulta esa medida y preguntó a los presentes quién respaldaba la decisión de que se entregaran los apoyos de manera directa y quiénes no. A mano alzada, la mayoría avaló la estrategia gubernamental.

 

Incluso, ante la inconformidad de los antorchistas que subieron el tono de sus protestas, argumentó que son los líderes quienes se quedan con los recursos cuando éstos se entregan de manera indirecta, mientras la gente está en pobreza.

 

“Ya se acabó el reparto de despensas, ya no se van a repartir migajas, ya no se va a repartir frijol con gorgojo”, anotó durante la asamblea realizada en el estadio de béisbol de la Unidad Deportiva “Josefa Ortiz de Domínguez”.

 

En ese marco, indicó que se apoyará a las comunidades indígenas con créditos a la palabra, sin intereses, a través de las llamadas Tandas para el Bienestar, para artesanas que tienen un pequeño taller. Los apoyos serán sin papeleos de por medio y sin dejar nada en garantía.

 

“La mayor riqueza de México es la honestidad de su pueblo”, dijo al resaltar que en un principio serán seis mil pesos de apoyo y que conforme se vayan liquidando el monto se incrementará a 10, 15 y hasta 20 mil pesos, lo que permitirá incrementar la economía familiar y de la zona.

 

Cuando el presidente hablaba de su compromiso de garantizar la salud para todos los mexicanos y cuestionaba a los que “antes callaban como momias y ahora gritan como pregoneros”, los antorchistas subieron de tono sus reclamos, por lo que hizo un alto en su discurso y puntualizó:

 

“Pero ¿saben qué? ¿Dónde nos formamos nosotros? ¿Dónde nos hicimos nosotros? ¡En la calle! ¡En las plazas! ¿Quieren gritar? ¡También nosotros sabemos gritar y a ver quién se cansa primero!”, exclamó.

 

Ya con los ánimos serenados, comentó que son muchos los problemas del país, “graves y grandes”, por ello reiteró que la Cuarta Transformación significará saciar el hambre y sed de justicia del pueblo. Para eso es la Cuarta Transformación”, concluyó.

 

 

fahl