El 16 de enero de este año titulamos la columna “Veytia-Sandoval”.

Escribimos esto: “¿Usted le cree al ex presidente Carlos Salinas que no sabía en qué estaba metido su hermano Raúl?, ¿se traga aquella de que Carlos Romero Deschamps no estaba enterado del ‘huachicoleo’, un negocio que deja 80 mil millones de pesos al año?

“O acaso ¿nadie en el PAN sabía de la terrible corrupción que caracterizó al gobierno de Guillermo Padrés? y ¿nadie en el PRI sabía de la maquinaria de los gobernadores Humberto Moreira, Arturo Montiel, Rodrigo Medina, César y Javier Duarte para ordeñar sus respectivos estados?

“¿De verdad nadie se dio cuenta de las irregularidades de la construcción de la Estela de Luz, y no pudo el gobierno de Felipe Calderón rastrear los mil 146 millones de pesos?

“¡Pobres contralores mexicanos y chafas funcionarios de la Secretaría de la Función Pública que no detectaron relación irregular alguna entre la empresa brasileña Odebrecht y Pemex!

“Pamplinas, la corrupción es una cadena de complicidades, y los mexicanos ya no nos chupamos el dedo.

“Por eso, nadie en su sano juicio puede creer que el ex fiscal general de Nayarit actuaba solo.

Ahora sabemos que el ex gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval, recibió sobornos del Cártel Jalisco Nueva Generación y de su célula los Cuinis, según denunció la semana pasada el Gobierno de Estados Unidos.

El Departamento del Tesoro informó a través de un comunicado oficial que por esos motivos le fueron congeladas sus cuentas bancarias para así enfrentar la justicia norteamericana por lavado de dinero.

De acuerdo a la investigación, Sandoval recibió dinero de los Beltrán Leyva y de la organización criminal de Raúl Flores Hernández, desde que era alcalde de Tepic en 2008. Además, se comprobó que malversó activos y recibió “mordidas” a cambio de protección.

Por si fuera poco, los Estados Unidos le siguen la pista a su esposa, Ana Lilia López Torres, y a sus hijos, Lady Alejandra Sandoval López y Pablo Roberto Sandoval López.

Obviamente el priista Sandoval se defendió a través de un comunicado en Twitter, donde se ofreció poner a disposición de las autoridades correspondientes con la información que se le requiera, y aseguró que su gobierno lo hizo apegado a la ley.

En este espacio obviamente le platicaremos el desenlace de la dupla Veytia-Sandoval, que para la justicia americana son unos vulgares socios de narcotraficantes.

Coahuila.- Tras un proceso judicial, en el que aparecía acusado de cuatro cargos relacionados con la importación y distribución de cocaína a Texas, conspiración de lavado de dinero y portación de armas, Juan Manuel Mono Muñoz Luévano sólo se declaró culpable de lavar dinero de las drogas, a cambio de formalizar un acuerdo que lo convierte en “informante” del Gobierno de Estados Unidos.

Es decir, servirá como testigo protegido para señalar a sus cómplices y así reducir sus penas.

Todo indica que le explicará a las autoridades la relación estrecha entre el ex gobernador Humberto Moreira, el tesorero de Coahuila (Héctor Javier Villarreal Hernández) y varios cárteles que introdujeron drogas a la Unión Americana desde nuestro país, con la protección del entonces mandatario tricolor y su gabinete.

Se dice que Moreira y el Mono Muñoz eran los representantes de los Zetas en Europa, con base en España.

En las próximas semanas podrían ser detenidos Roberto Sandoval y Humberto Moreira, dos ex gobernadores del PRI, y se fortalecería la tesis de la “mafia del poder” que tanto repite el ahora Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.