La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió mantener sin cambios su tasa de interés de referencia interbancaria en 8.25%, aunque advirtió sobre riesgos para la economía nacional como la guerra comercial que está enfrentando Estados Unidos con sus principales socios, la posible baja en la calificación crediticia de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la falta de certidumbre en las inversiones.

En su informe de política monetaria, difundida este jueves, el organismo central explicó que si bien hay confianza en que la inflación regrese a su meta de entre 3.0% y 4.0% en el corto plazo, aún prevalecen riesgos que pueden contaminar los precios de los productos y por lo tanto afectaría en el indicador.

A los riesgos antes mencionados, se suma la falta de Estado de Derecho, la persistencia de la corrupción, un aumento en los índices delictivos y un incremento en la inflación en los últimos meses, por aumento en los precios de productos energéticos y agrícolas.

Sobre ello, especialistas como José Luis de la Cruz, director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), opinan que este año será “casi imposible” reducir la tasa de interés del Banxico, debido a la desconfianza en los mercados sobre la situación de Pemex y el difícil entorno macroeconómico.

“Este año veo muy complicado que el Banco reduzca la tasa de interés, principalmente por elevando índice que presenta la inflación”, comentó en entrevista con 24 HORAS.

A su vez, el director del Grupo Financiero Ve por Más (Bx+), Gilberto Romero, resaltó en un análisis que la tasa de interés se mantendrá sin cambios en las futuras decisiones de política monetaria. En su momento, indicó que existía una posibilidad de ver un ajuste a la baja de la tasa durante último cuatrimestre del año, siempre y cuando se mejoraran los indicadores del mercado interno.

Los especialistas coincidieron en que la tasa de interés del Banxico podría sufrir un decremento, en caso de que la Reserva Federal en Estados Unidos (FED, por sus siglas en inglés) también reduzca su indicador de referencia.

De la Cruz explicó que a pesar de la ayuda financiera y la restructuración de la deuda de Petróleos Mexicanos, el país sigue mandando señales de incertidumbre en los mercados internacionales.

“Las calificadoras están buscando que se genere certidumbre ante la ayuda que recibe Petróleos Mexicanos y de lo que esto podría ocasionar en la economía nacional”, comentó.

 

Las alertas

Que siga la debilidad financiera de Pemex.
La falta de Estado de Derecho en inversiones.
Prevalece la corrupción en el Gobierno.
Precios de los productos continúen a la alza.