Foto: Cuartoscuro En lo que va del año el personal especializado apercibió a 447 dueños y empleados de comercios aledaños a escuelas de la UNAM  

El Instituto de Verificación Administrativa de la Ciudad de México realizó 76  apercibimientos a establecimientos mercantiles que se encuentran en los alrededores de bachilleratos de la UNAM, 46 corresponden al  Colegio de Ciencia y Humanidades (CCH) plantel Oriente y 30 a la Preparatoria 1, con el propósito de evitar la venta de bebidas alcohólicas a menores de edad.

 

La acción del Invea se realizó en el marco del programa “Sendero Seguro” que la jefa de Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum, anunció el domingo pasado con el objetivo de reforzar la vigilancia en las inmediaciones de 53 escuelas de bachillerato tanto de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) como del Instituto Politécnico Nacional (IPN).

 

Del 25 de enero al 26 de abril el Invea implementó el programa “Sendero Seguro” en las inmediaciones de las escuelas de educación media superior de la UNAM, la principal actividad del personal especializado es sensibilizar y realizar verificaciones a negocios que vendan alcohol a menores de edad.

 

Como resultado de esas acciones se realizaron 49 apercibimientos a dueños y empleados de comercios ubicados en la zona limítrofe entre Iztacalco e Iztapalapa, además de que se clausuraron cuatro establecimientos aledaños al CCH Oriente.

 

En todos los apercibimientos se informó a los encargados y dueños sobre la importancia de no vender alcohol a menores o cualquier otra droga, debido a que está prohibido por la ley.

 

Desde su implementación en todos los CCH y preparatorias, el programa de “Sendero Seguro” ha realizado 447 apercibimientos, 18 visitas de verificación, 14 suspensiones de actividades y 6 inspecciones oculares.

 

No obstante será en agosto próximo que se intensifiquen las acciones de este programa dado que las escuelas de la UNAM están cerrando el semestre y será hasta dentro de tres meses cuando los estudiantes regresen a clases.

 

Durante los recorridos de apercibimiento, el personal del Invea entrega un tríptico donde recuerdan a quienes tienen o son responsables de un local o negocio la importancia de cumplir los horarios de funcionamiento y no permitir que los clientes permanezcan en el interior de los inmuebles después del horario permitido.

 

Otros aspectos que deben cumplir son: respetar la capacidad de aforo a fin de evitar  accidentes en caso de cualquier contingencia, así como para evitar aglomeraciones en la entrada principal y las salidas de emergencia, mismas que deberán estar debidamente señalizadas.

 

De igual manera está prohibido fumar dentro de todos los establecimientos, tener barra libre o promociones similares, así como elaborar o vender bebidas  con productos que no cuenten con registro sanitario, permitir apuestas y exigir el pago de propinas o gratificaciones.

 

Además de las medidas de seguridad con las que deben contar los establecimientos, se les recuerda a los encargados que en caso de una verificación del Invea se les pedirá el permiso de operación con giro de impacto zonal, la póliza de seguro vigente y el programa interno de Protección Civil, en caso de no contar con cualquiera de esos documentos se les suspenderán sus actividades.

 

dpc