Foto: Cuartoscuro El Senado de la República, aprobó la Reforma Educativa que abroga la reforma de 2013 impulsada por el ex Presidente, Enrique Peña Nieto  

Con 95 votos a favor, 25 votos en contra, entre ellos los votos de los senadores del pan y el senador sin partido Emilio Álvarez, y dos abstenciones: de la senadora del PRI, Vanessa Rubio y del PVEM, Alejandra Lagunes; el Senado de la República, aprobó la Reforma Educativa que abroga la reforma de 2013 impulsada por el ex Presidente, Enrique Peña Nieto.

 

Al presentar el dictamen, el presidente de la comisión de educación en el Senado, Rubén Rocha, llamó a los diversos grupos parlamentarios a apoyar una reforma elaborada por todos; no obstante, reconoció que esta es la reforma, “del Presidente Andrés Manuel López Obrador, como lo fue la reforma anterior del Presidente Enrique Peña y como lo fue la reforma de Adolfo López Mateos”.

 

Además, resaltó que las modificaciones evitarán malos manejos en las plazas magisteriales.

 

“Que quede claro esta reforma educativa no deja ninguna cobertura para negociaciones que conduzcan a corrupciones ni manejos indebidos del patrimonio de los mexicanos  como las plazas y en general la nómina del servicio educativo”, advirtió.

 

En ese contexto, explicó que se elimina el carácter de una evaluación punitiva para los docentes y se sustituye por una evaluación formativa y diagnóstica, toda vez que desaparece el Instituto Nacional de Evaluación de la Educación (INEE).

 

Resaltó que se eleva a carácter de universalidad el derecho humano de la educación, disponiendo que de cero a 3 años será la educación inicial y la educación superior tendrá carácter de obligatoria.

 

Asimismo dijo que el propósito central de la reforma, es mejorar el interés supremo de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes. Y que el maestro en lugar de estar en las calles protestando, esté en las aulas dando clases.

 

No obstante, la senadora del PAN, Minerva Hernández, consideró que en el artículo Décimo Sexto Transitorio “se advierte el peligro de que el Estado mexicano ceda a las presiones políticas del Sindicato o de la Coordinadora, de que regresemos al esquema de la venta de plazas o al pernicioso control sindical de las mismas”.

 

El senador de Movimiento Ciudadano, Samuel García, recordó que su grupo parlamentario votó en contra de la reforma educativa de Peña Nieto, por ello, en congruencia, este martes darían su voto a favor de la “ambiciosa, vanguardista e incluyente reforma educativa”, y agradeció que se haya incluido en la exposición de motivos programas presupuestales pluri sectoriales. Y llamó al Presidente, Andrés Manuel López Obrador a dejar sin efecto el memorándum sobre el tema.

 

Mientras que la senadora del PRI, Beatriz Paredes destacó que “nuevamente el Poder Legislativo evidenció su disposición a resolver los problemas nacionales con un espíritu constructivo en la búsqueda de que no sea el pensamiento único el que predomine en nuestro país. Arriba es la inclusión que es la característica que acredita la vocación democrática”, manifestó.

 

El dictamen que continúa su discusión en lo particular, crea el Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación, el cual será coordinado por un organismo público descentralizado con autonomía técnica, operativa, presupuestaria, de decisión y de gestión, con personalidad jurídica y patrimonio propios, no sectorizado.

 

Se aprueba también fortalecer las atribuciones del Estado en materia educativa, para ello, impartirá y garantizará la educación inicial y superior; y, le corresponderá la rectoría de la educación, que, además de obligatoria, será universal, inclusiva, pública, gratuita y laica.

 

La ley establecerá las disposiciones del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros en sus funciones docente, directiva o de supervisión. Corresponderá a la Federación su rectoría y, en coordinación con las entidades federativas, su implementación.

 

 

fahl