En Latinoamérica, México es el país que cuenta con la tasa de reemplazo más baja para el sistema de pensiones, tanto para hombres como mujeres, lo cual se explica como consecuencia que la tasa de aportación por parte de los trabajadores a las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) solamente es de 6.5%.

Un estudio realizado por Fundación Mapfre, empresa líder en el mercado asegurador, revela que la tasa de reemplazo (el porcentaje que reciben los trabajadores con relación a su último sueldo al pensionarse) para los hombres mexicanos es tan sólo de 32.1%, mientras que para las mujeres es de 29.2%.

Si dicha medición se compara con la de países como Argentina, la diferencia es abismal, ya que ahí la tasa de reemplazo de los hombres es de 89.6%, y para las mujeres es de 81.6%, o en Colombia, país en el que el sexo masculino recibe una tasa de 75.3% y el femenino de 68.2%, de acuerdo a los datos presentados por la empresa aseguradora.

Jesús Martínez, CEO de Mapfre para México y Latinoamérica, consideró que dicha problemática radica en la baja tasa de aportaciones obligatorias por parte de los trabajadores incorporados al sistema formal mexicano es mínima.

En conferencia de prensa, Martínez expuso que en el país, para poder alcanzar mejores tasas de reemplazo es necesario que se junten dos factores, el primero, aumentar la tasa de aportación obligatoria desde un 6.5%a un 16%, tal como ocurre en los países asociados a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) pero de forma gradual, además que la edad de retiro para las generaciones pase a ser de 70 años.

Y aunque este tipo de medidas pueden ser un tanto disruptivas para el trabajador formal mexicano, en países latinoamericanos se han adaptado y ello ha premiado que al final de la edad laboral, el trabajador obtenga mejores resultados mediante su Afore.

Al presentar el estudio Pensiones y Comparativa Internacional, Jesús Martínez de Mapfre detalló que la situación en México es preocupante para el mercado, ya que, además de los números previamente mencionados, en el país, del total de la población que ya se encuentra en edad para trabajar, es decir, 93 millones 547 mil 756 personas, solamente el 59.8% de ellas, o 55 millones 962 mil 275 mexicanos se encuentran dentro de la Población Económicamente Activa (PEA), según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) que lleva a cabo el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Brecha aseguradora con síntomas detectados

Por otra parte, Manuel Aguilera Verduzo, director general de Estudios de Mapfre, presentó el primer indicador global que mide el potencial asegurador, llamado Índice Global del Potencial Asegurador, en el cual se descubrió que hay una Brecha de Protección del Seguro (BPS).

Según el directivo, la brecha en el caso de nuestro país deriva principalmente por el hecho que hay algunos seguros, tal como el automotriz, que no es obligatorio para los mexicanos, además de que esto se presenta más constantemente en los países de economías emergentes.

Además, Aguilera Verduzo precisó que la brecha aseguradora en el país corresponde a un monto de 169 mil millones de dólares y por segmento, a México para poder cerrar esta especie de agujero, el sector que más tardaría sería el de seguros de vida por un lapso estimado de al menos 20 años, mientras que el ramo de seguros de no vida sería de 15.

No obstante, el sector seguros se defiende, y considera que hoy en día hay un área de oportunidad para combatir este problema.

Recaredo Arias, director general de la Asociación Mexicana de la Industria de Seguros (AMIS), declaró en el marco de este evento que obligar el hecho de que el seguro automotriz no sea obligatorio en nuestra nación e interfiere en dicha brecha es solo un ejemplo.

“Desde luego que se debe buscar, también, hacer el cumplimiento de otros seguros obligatorios como el de daños, ahí estamos rezagados. Tenemos una tarea muy importante que cubrir. Nosotros podemos tener un mercado cinco veces mayor al que tenemos… Tenemos un reto, acercar a la población con los distintos canales de comunicación y productos más adecuados y tener las personas, las condiciones económicas necesarias para poder acceder a ellos”, refirió.

gac