Desde primera hora de la mañana somos testigos del control político que tiene el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Su mensaje dirigido a claros destinatarios, los que están con él si les dan un premio, recuerda que sus adversarios lo quieren destruir y eso no lo va a permitir.

Se presenta con paciencia, talento, experiencia y con un traje ensanchado a su medida para no desesperar.

Para muchos las mañaneras no son ejercicio democrático. Pareciera que cualquier opinión que no comparta su discurso es un delito.

Sigue su lucha contra la mafia y aunque lo descarta es ya una guerra, aunque no se haya declarado.

Demostrando su talento ofensivo acude a la defensa que es la clave de todo.

El presidente López Obrador habla de corrupción generalizada y se refiere a la prensa que siente su intimidad atropellada.

Esto dice el presidente López Obrador:
“¿Qué son, al final, los fifís? Son fantoches, conservadores, sabelotodo, hipócritas, doble cara. Existe una prensa fifí, no es una invención, existe el partido de los fifís, existe el conservadurismo en México y creo que nunca ha desaparecido, no están de acuerdo con nosotros, son nuestros adversarios”.

Con sus declaraciones el Presidente parece decir si quieren guerra, guerra tendrán y lo cierto es que cuenta con los medios para ganarla.

Ante la provocación y lo que considera acoso que lo hace intolerable, responde:

“No me voy a quedar callado ante la hipocresía del conservadurismo, porque los conservadores, los fifís, tienen como doctrina, y podría decir su única doctrina, la hipocresía.

Entonces, ya basta de simulación, fuera máscaras. Existe un partido conservador, están molestos con nosotros, querían seguir manteniendo este régimen de injusticia, de corrupción, de privilegios, querían que continuara el saqueo en el país y la gente dijo: ‘Basta’, aprobó que se llevan a cabo los cambios, las transformaciones y ellos no se resignan”.

No hay nada que produzca más daño que entremezclar decisiones políticas con personales, y con las mejores versiones de su pasado acusa y demuestra quién está al mando. El presidente López Obrador dice:

“Si la prensa fifí todos los días, un día sí y el otro también se dedican a cuestionar y a veces a calumniarnos, todos los días, como sistema – (es) porque hay una línea editorial en contra nuestra, no desarrollada a partir del pensamiento de cada periodista, de cada escritor, sino una consigna de parte de los dueños de los medios…”.

El presidente López Obrador dice “tengo también el derecho de expresarme, de manifestarme y que no se entienda que es una cuestión de odios, de rencores…” y tiene toda la razón, pero una cosa es negar un problema y otra aceptar la realidad.

jfcastaneda9@hotmail.com