Foto: Reuters A fines del siglo XIX, alrededor de un 30% de los niños aborígenes de dicho país, cerca de 150,000 menores, fueron puestos en lo que se conocía como "escuelas residenciales" en un intento del gobierno por despojarlos de su cultura tradicional y lenguas ancestrales  

Este lunes el presidente Andrés Manuel López Obrador causó polémica al pedir al Rey de España Felipe VI  y al papa Francisco pedir perdón por la violencia en la Conquista y la imposición de la religión.

Sin embargo, López Obrador no es el primero que ha pedido una disculpa. En junio de 2017, el primer ministro de Canadá Justin Trudeau solicitó al monarca católico que se disculpara con los niños aborígenes de su país.

Esto por el trato que les dio la Iglesia católica en las escuelas que administra en Canadá.

“Le dije lo importante que es que los canadienses avancen en una reconciliación real con los pueblos indígenas y le resalté como él podía ayuda emitiendo una disculpa”, dijo Trudeau.

A fines del siglo XIX, alrededor de un 30% de los niños aborígenes de dicho país, cerca de 150,000 menores, fueron puestos en lo que se conocía como “escuelas residenciales” en un intento del gobierno por despojarlos de su cultura tradicional y lenguas ancestrales.

Por más de un siglo, las escuelas fueron financiadas por el Gobierno, pero muchas eran administradas por iglesias cristianas, la mayoría por iglesias católicas romanas.

La Comisión de Verdad y Reconciliación de Canadá dijo en un reporte en 2015 que la práctica, que mantenía alejados a los niños de las comunidades de las Primeras Naciones, Inuit y Métis de sus padres, era equivalente a “genocidio cultural”.

Además, se supo que muchos niños fueron abusados física y sexualmente.

En marzo de 2018, Trudeau se mostró  “decepcionado” ante la decisión del Papa Francisco de no hacer una disculpa pública y formal a los indígenas canadienses.

El arzobispo Lionel Gendron, presidente de la Conferencia Canadiense de Arzobispos Católicos dio a conocer una carta dirigida a los pueblos indígenas de Canadá en donde el Papa Francisco dice que está consciente de las injusticias cometidas contra los indígenas de todo el mundo y que él personalmente no puede dar una disculpa por lo que sucedió en las residencias escolares.

Ante este anuncio Trudeau declaró a la prensa estar “obviamente decepcionado” por la decisión de la Iglesia Católica de no disculparse por su rol en las residencias escolares.

Recalcó que tomar responsabilidad de “errores en el pasado y pedir perdón” es fundamental en los valores de los canadienses.

“La reconciliación es no sólo entre el gobierno y los indígenas sino también entre los canadienses no indígenas y los indígenas canadienses”, agregó el primer ministro quien dijo que su gobierno seguirá trabajando con las comunidades e individuos en el camino a la reconciliación.

 

JMSJ