En México el 63% de las escuelas a nivel preescolar -públicas generales y privadas- carecen de servicios de infraestructura, tales como: agua, luz, sanitarios, aulas, área de juegos y, además, los inmuebles presentan problemas de mantenimiento. Tan sólo el 37% cuenta con servicios básicos.

Así lo dio a conocer el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) durante la presentación del informe Evaluación de las Condiciones Básicas para la Enseñanza y el Aprendizaje (ECEA).

El nivel preescolar se constituye de 88 mil 842 escuelas, de las cuales 74 mil 446 son públicas y se dividen en tres tipos: generales, indígenas y comunitarias; 14 mil 396 son de carácter privado.

El estudio reveló que en los jardines de niños, tan sólo el 57% sí realizan simulacros; 52% cuentan con zonas de seguridad; 49% tiene rutas de evacuación; y únicamente 38% cuentan con un plan de protección civil.

Por otro lado, el INEE destacó que 64% de las escuelas comunitarias e indígenas no cuentan con agua potable a diario; el 19% de las comunitarias y 14% de las indígenas carecen de sanitarios.

El levantamiento de datos se realizó en escuelas de preescolar durante el mes de octubre y noviembre de 2017, posterior a los sismos suscitados en septiembre de aquel año.

Además, 65% de las comunitarias no poseen una área de juegos y, las que tienen, 37% está en mal estado; y en el caso de las indígenas, los porcentajes son del 62% y 35 %, respectivamente.

La evaluación se aplicó en las 32 entidades federativas en 2 mil 141 escuelas; participaron 2 mil 17 representantes de la Asociación de Padres de Familia; así como 4 mil 171 docentes, mil 595 directores, 30 mil 891 padres de familia y 394 Líderes para la Educación Comunitaria.

La directora general de evaluación de la oferta educativa del INEE, C, señaló que las escuelas preescolares de México muestran importantes carencias de infraestructura, falta de servicios básicos, espacios , así como de mantenimiento a los inmuebles.

Schmelkes del Valle señaló que, dentro de los resultados que muestra el estudio, se destaca la necesidad por parte de las escuelas hacia los padres de familia, las cuales tienden a recurrir a ellos para contar con los recursos “indispensables” para poder operar.

“Que los planteles no estén dotados de las condiciones mínimas para operar, atenta contra la gratuidad de la educación (…) los padres de familia no pueden permitir que sus hijos estudien en escuelas sucias, peligrosas o sin el equipamiento indispensable”, aseveró.

LEG