El Banco de México (Banxico) aceptó que la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) fue uno de los elementos que contribuyó a que la desaceleración económica al cierre de 2018 en el país fuese “más rápida de lo anticipada”, además advirtió que la baja en los niveles de crecimiento económico continuará en los primeros meses de este año.

Al presentar el Reporte de Economías Regionales de octubre a diciembre del año pasado, Daniel Chiquiar Cikurel, director general de Investigación Económica del banco central, afirmó que tanto la actividad productiva en la industria de la construcción en la región centro del país fue la más afectada por la cancelación del proyecto de Texcoco.

Aunque las perspectivas para el inicio del año no son las más favorables, el especialista pronosticó que a lo largo de 2019, el efecto de la desaceleración económica tanto en México como en el mundo, comenzará a desaparecer, y en el caso del país, habrá mayor construcción de obras de infraestructura que ayudarán al crecimiento económico.

Chiquiar también refirió que otros eventos que afectaron a la economía de las regiones nacionales fueron los paros laborales que se observaron en Matamoros, Tamaulipas, y mencionó que la demanda de que algunos trabajadores sobre un 20% de incremento salarial y un bono anual de 32 mil pesos, no se pueden explicar tras haberse duplicado tres veces más el salario mínimo en la franja norte a inicios de esta administración.

En tanto, las afectaciones a las economías regionales también se vieron afectadas por los bloqueos de las vías férreas en Michoacán por parte de los trabajadores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores por la Educación (CNTE).

Pero, no todo fueron malas noticias, pues aseguró que el desabasto de combustibles en la primera quincena del año, como consecuencia del plan de combate al robo de hidrocarburos del Gobierno federal, no tuvo incidencia alguna sobre los precios de los bienes en el país.

Sobre este tema, demostró, a través de una gráfica, que la actividad de las empresas relacionadas con la distribución de gasolina se vio afectada sólo de manera marginal.

Juan Ángel Espinosa

LEG