Tras la elección de julio pasado, adelantamos:
El guerrerense René Juárez Cisneros dejará la presidencia del PRI, a la que llegó tardíamente, para ser coordinador de su bancada en la Cámara de Diputados.

Luego, cuando tras asimilar la derrota con una dirigente de trámite –triste papel de Claudia Ruiz Massieu- y venga la convocatoria para elegir nuevo dirigente, intentará regresar al cargo por la vía democrática.

Hoy reflexiona sobre si sigue sobre esa ruta.

Las condiciones han cambiado: no tiene control ni influencia mayor en la estructura priista, la nomenklatura se mueve hacia otras direcciones y hay muchos aspirantes.

Al menos dos de ellos son espontáneos: Ulises Ruiz e Ivonne Ortega.

No es el caso de Alejandro Moreno Alito y José Narro Robles.

El gobernador de Campeche ha creado una extensa y tupida red de apoyos donde figuran ex dirigentes nacionales, gobernadores, ex mandatarios estatales y promotores electorales para agitar a la militancia.

A su vez, el ex secretario de Salud y ex rector de la UNAM suma apoyos, y en una lucha abierta, cree, está en condiciones de ser el próximo presidente del PRI.

NI SALINISMO NI ATLACOMULCO

Hasta ahora es el duelo perfilado: Alejandro Moreno-José Narro Robles.

O viceversa, según la visión del lector o simpatizante.

No es segura –o más bien se pasa de insegura- la inscripción de René Juárez Cisneros para la elección de agosto próximo y sigue perfilada la lucha como la adelantamos aquí: Narro vs. Alito.

Están descartados muchos priistas de pedigrí: -Manlio Fabio Beltrones, Emilio Gamboa Patrón- o militantes fácilmente identificables con sus corrientes u otras.

La de Carlos Salinas sí participará, pero no abiertamente.

Tampoco hay movimiento en el Grupo Atlacomulco, a donde pertenece el ex presidente Enrique Peña, a pesar de tener al priismo estatal más sólido del país, el mexiquense.

No irá siquiera Miguel Ángel Osorio Chong, el coordinador senatorial tricolor a quienes muchos quieren ver como el hombre más cercano a Peña Nieto.

Él tendrá sus razones personales y políticas, pero a juicio de su entorno no hay nada atractivo en un partido deshecho y sin perspectivas de posiciones porque la candidatura presidencial está muy lejos.

O sea, se queda en el Senado.

IFT: TIBIEZA DE COMISIONADOS

1. El IFT sigue sin agradar a los mercados.

En vil copia de la decisión brasileña, ha declarado válida la fusión de las cadenas internacionales Walt Disney y 21st Century Fox en México con algunos condicionamientos.

El principal es la desincorporación de Fox Sports, un clamor al cual se sumó Andrés Manuel López Obrador para salvar la transmisión de eventos deportivos mexicanos, en especial el futbol.

La inquietud fue atendida por los comisionados y de momento salva la competencia en ese mercado, en el cual participa de manera destacada Televisa, de Emilio Azcárraga Jean.

Claro, falta ver si 21st Century Fox cumple la norma y los mexicanos no perdemos el futbol y otros eventos deportivos de gran interés.

2. Ya viene el Tianguis Turístico, el primero a celebrarse con el nuevo Gobierno y sin el manto protector de organismos históricos como el Consejo de Promoción Turística y un Fonatur dedicado a acciones ajenas como el Tren Maya.

Hechos y retos a los cuales debe hacer frente el gobernador guerrerense Héctor Astudillo para este evento, a celebrarse del 7 al 12 de abril próximo en el puerto de Acapulco.

Las opiniones expresadas por los columnistas son independientes y no reflejan necesariamente el punto de vista de 24 HORAS.