Cuando María de Jesús de la Fuente de O’Higgins se abrazó con Claudia Sheinbaum, en el centro del país y en el inicio de esta semana en buena parte dedicada a la mujer, dos personas determinadas más allá de su género y en plena reivindicación política del mismo se conectaron al grave problema de la vulnerabilidad que lastima a más de la mitad de los mexicanos.
La fundadora de la primera Defensoría de Oficio de las Mujeres en los años cincuenta, una época en que las mujeres libres e independientes eran una enorme y más localizada audacia, y la primera jefa de Gobierno electa de la Ciudad de México, se asumieron ayer, como lo expresó Sheinbaum, como parte de “las mujeres superpoderosas” que por efecto de sus voluntades, disciplina y sus respectivas luchas han protagonizado acciones diversas contra las violencias que han diezmado a sus compañeras de género.
“Estos nombramientos -de una cincuentena de abogadas y una media docena de abogados que apoyaran la labor del Ministerio Público- llenan de alegría mi espíritu y siento un renacer de nuevas esperanzas en mi corazón”, comentó De O’Higgins, quien hablaba ante un micrófono sostenido frente a ella por la senadora Jesusa Rodríguez, presidenta de la Comisión de Género del Senado de la República
En sus 98 años de juventud, De O’Higgins le indicó a sus compañeras de profesión localizadas frente a ella en la planta baja del Palacio del Ayuntamiento que “lo más importante para ser una abogada de mujeres es escucharlas” en la pasión compartida que, recordó la senadora Rodríguez, es la esencia de la palabra compasión.
La estrategia anunciada e iniciada este lunes para fortalecer la labor del Ministerio Público capitalino con abogadas reconoce la insuficiencia y los límites de la cultura aún predominante de estructuras institucionales a las cuales cuesta trabajo y presentan resistencia antes que reconocer la necesidad de un enfoque más terminante y encauzado a favor de quienes sufren en cuantía considerable agresiones hasta llegar al feminicidio.
La voluntad, expresada también por la titular de la Procuraduría General de Justicia, Ernestina Godoy, para replantear el dinamismo y el ánimo de reconocer la realidad de las vulnerabilidades indicadas, ocurre semanas después de que los medios, el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México y las propias autoridades contribuyeron a evidenciar la dimensión de las amenazas que sujetan a muchas mujeres cuando viajan o abordan y salen de estaciones de sistemas de transporte público en que habrían ocurrido diversos incidentes, destacadamente las tentativas de secuestro.
Se presenta a 10 días de que se cumplan los primeros cien de vigencia de un nuevo Gobierno, el primero que tiene tal número de mujeres en posiciones de poder dentro del gabinete, destacando respecto de cualquier otro a nivel estatal y solamente rivalizando con el gabinete federal.
Mientras algunos consideran apropiado continuar negando que se registran cambios relevantes, De O’Higgins y sus compañeras “superpoderosas” movieron a los asistentes con una sacudida afectuosa por quienes han estado dispuestas a riesgos fundamentales mayores para reivindicar el derecho y la igualdad para todas las mujeres mexicanas.
Todos podemos aprender de De O’Higgins.
@guerrerochipres