Resulta revelador que el partido con mayor nivel de cumplimiento sea el PRI, y que los partidos que más deben sean el PRD y Morena, quienes tampoco pagan seguridad social a sus trabajadores, en franca violación a las normas laborales.

La destacable mejora reflejada por el PRI debe ser oxígeno puro para su presidenta Claudia Ruiz Massieu de cara a las próximas elecciones de gobernador en los estados de Baja California y Puebla; así como de alcaldes y diputados en otras entidades.

El lector recordará que no sólo el INE sufrió por la reducción de sus prerrogativas, sino también el PRI, quien como resultado de las elecciones de 2018, vio disminuido su financiamiento en un porcentaje superior al 30% respecto del año anterior, lo cual le impide desarrollar las actividades que cotidianamente realizaba.

En este panorama, la presidenta del PRI debe atesorar las buenas noticias y esta es una de ellas; el mérito no es menor, ya que comparado con el resto de los partidos es el único que logró poner en orden el cumplimiento de sus obligaciones fiscales, situación que indica estabilidad en las finanzas del partido y marca un ejemplo para sus adversarios políticos.

Por otro lado, es lamentable que los partidos políticos incumplan continuamente con sus obligaciones fiscales y las autoridades no tomen cartas en el asunto.

En primera instancia, el INE, que tuvo como titular de la Unidad Técnica de Fiscalización a Lizandro Núñez Picazo, otrora Administrador General de Recaudación del SAT, no realizó acción alguna para combatir este problema, cabe recordar que como funcionario del SAT, declaró que no existían tratamientos especiales para los institutos políticos, se les vigilaba como cualquier otro contribuyente.

De igual forma, la Procuraduría Fiscal de la Federación no ha actuado al respecto; sin embargo esta instancia, ni tarde ni perezosa, amenazó al INE con proceder en su contra si no cumplía con sus obligaciones tributarias. ¿Por qué no ha realizado acciones contra los partidos políticos morosos? ¡Morena, es hora de demostrar esa ausencia de privilegios!

 

Xavier Rodríguez

LEG