La guerra del Presidente

Nos cuentan que entre los resultados que han arrojado las conferencias mañaneras del nuevo Gobierno, tan sólo ha existido un momento en específico que nada gustó al presidente Andrés Manuel López Obrador. Algunos personajes cercanos al titular del Poder Ejecutivo aseguran que la reproducción de la frase “Oficialmente ya no hay guerra” no ayudó a los objetivos que se tienen de construir la imagen de un líder en permanente lucha contra la delincuencia y la corrupción. De hecho, aseguran que los buenos dividendos obtenidos en imagen por la guerra contra el huachicol tocaron techo justo en el mencionado momento. ¿A eso se deberá que este lunes saldrá el ex priista y hoy feroz morenista Manuel Bartlett a iniciar una nueva guerra contra los saqueadores de la CFE? ¿Será?

 

La ciencia en el olvido

Las cosas en el Conacyt se ponen cada vez más complicadas, toda vez que, nos dicen, la comunidad científica no se acaba de adaptar a la nueva dirección de María Elena Álvarez- Buylla, quien les avisó hace unos días que se reducirá a la mitad la estructura del organismo. El recorte, nos comentan, empezará con la desaparición de la Agencia Conacyt, el departamento encargado de la divulgación de los desarrollos científicos y en el que laboran alrededor de 50 investigadores. Propios y extraños se preguntan cómo nos vamos a enterar ahora de los trabajos que se generan en la institución; si con la agencia funcionando era ya difícil conocerlos, sin ella, los expertos advierten que la ciencia quedará en el completo olvido. ¿Será?

 

Robo de plomo

 

El crimen organizado no da tregua, pues no sólo está en el robo de combustible, sino que en los últimos meses se ha intensificado el hurto de contenedores y escoria (residuos) de plomo, como ocurre en dos plantas recicladoras en los municipios de García y Ciénega de Flores, en Nuevo León. Se dice que el crimen organizado emplea su máxima de “plomo o plata”, y obviamente choferes de tráileres, guardias y empleados en las plantas prefieren el soborno. ¿Será?

 

Le llueve a Vega Serrador

Pues Ricardo Antonio Vega Serrador, cabeza de Corpogas, ya no ve lo duro, sino lo tupido. Y es que las investigaciones por comercialización de gasolinas robadas -que lleva a cabo la Fiscalía General de la República- y por lavado de dinero y evasión fiscal -que desarrollan la Unidad de Inteligencia Financiera y el SAT- sólo son el comienzo. Vega Serrador, quien ha sido identificado como cercano a los ex gobernadores Félix González Canto y Roberto Borge Angulo, ahora enfrenta la revisión de los Permisos de Administración Temporal Revocables en la Ciudad de México. Y por si fuera poco, ya lo investigan en Quintana Roo, porque durante la administración de Roberto Borge, fue beneficiario de la comercialización de terrenos en zonas de alta plusvalía vendidas a precio de ganga. ¿Será?

 

Sacrificada

Se comenta que de acuerdo a los recientes nombramientos en la Fiscalía General de la República, habrá un impacto en la terna de tres prestigiadas mujeres rumbo a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pues una ya se hizo el harakiri, por lo que la lucha será entre dos por su propia naturaleza. ¿Será?

LEG