En México, de los 699 mil 450 decesos que se registraron en el país durante el 2017, tan sólo 20 mil personas contaban con un plan de previsión funerario, lo que representa más de 679 mil personas que tuvieron que afrontar los gastos de un servicio funerario de manera inmediata el año pasado.

 

De acuerdo con la agencia funeraria Gayosso,  del total de los fallecidos que tuvieron que contratar un servicio funerario de forma inmediata, se estima que cerca del 40% pasó sus últimas horas en compañía de sus seres queridos en su domicilio.

 

Con el fin de evitar contratiempos al enfrentar la partida de un ser querido en casa, es importante tomar en cuenta que se requiere un certificado médico de defunción, así como gestionar el documento oficial ante autoridades y dejar en manos de un experto el servicio funerario.

 

En un comunicado, la compañía explicó que si la muerte fue por causas naturales, no es necesario dar aviso a la policía, ya que de una muerte natural, se podría volver una muerte accidental y enfrentaría un proceso en el Ministerio Público y luego en el Servicio Médico Forense (Semefo).

 

En el marco del Día de Muertos, señaló que es importante que el certificado de defunción cuente con la identidad del médico que lo expide y especifique las circunstancias del deceso, así como los datos correctos de la persona que falleció.

 

Éste se gestiona a través de la agencia funeraria, o directamente en el Registro Civil, para lo que solicitarán el certificado médico de defunción.

 

La agencia funeraria subrayó que en momentos tan dolorosos es recomendable organizar una red de apoyo familiar (hijos, tíos, hermanos, primos y amigos) y dejar en manos de un experto, el servicio funerario.

 

Al respecto, el director de planeación y nuevos negocios de la compañía, Óscar Chávez dijo que “el Día de Muertos es una de las tradiciones más celebradas por los mexicanos, aprovechemos este significativo momento de unión familiar para platicar (en vida) de cómo queremos que nos recuerden y que nos despidan”.

 

DPC