Foto: Cuartoscuro El director del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), CarlosBarba, indicó que 216 cuerpos aún tienen un expediente forense completo  

GUADALAJARA. Solo alrededor de la mitad de los 444 cuerpos bajo resguardo del Servicio Médico Forense de Jalisco, incluyendo a los 322 cadáveres abandonados por esa dependencia y la Fiscalía estatal, tienen un expediente de identificación que permita su inhumación.


Consuelo González, procuradora social del Gobierno de Jalisco, informó hoy en conferencia de prensa que de los 444 cuerpos que estaban en la morgue y en los contenedores, 189 han sido inhumados en el cementerio de Guadalajara y 39 fueron reconocidos y entregados a sus familiares, para un total de 228 cadáveres identificados.

Afirmó que luego del hallazgo de los cadáveres las autoridades han apostado “por la identificación, más que por la inhumación”, y dado prioridad a buscar a los familiares para poder entregárselos.

El director del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), Carlos Barba, indicó que 216 cuerpos aún tienen un expediente forense completo que consiste en autopsia, fotos del cadáver, huellas, dictámenes antropológicos y dentales y perfil genético.

“Nos encontramos integrando los expedientes básicos de identificación, que es necesario tenerlos en su totalidad para poder inhumar un cuerpo. De manera paralela se está buscando a los familiares e integrando las carpetas”, explicó.

Afirmó que obtener los dictámenes perfil genético ha sido “tardado” ya que muchos de ellos están en un avanzado estado de descomposición, por lo que ha sido necesario tomar las muestras genéticas de huesos, lo que requiere un proceso distinto al de la sangre.

Para obtener estos perfiles genéticos el IJCF ha pedido ayuda a sus homólogos de Aguascalientes y Guanajuato para procesar las muestras, dijo.

Agregó que la Comisión para el Acompañamiento y Observación del Proceso de Identificación e Inhumación de la que forma parte el Instituto tomó la decisión de que ningún cadáver sería inhumado hasta tener los resultados del perfil genético y no solo con la muestra, como se hace en otros casos.

De los 39 cuerpos identificados por los familiares, casi todos eran varones y la mayoría eran originarios de Jalisco, excepto uno que era del Estado de México, detalló.

Barba aceptó que varias de esas familias habían acudido antes al IJCF para buscar a sus parientes y encontraron una respuesta negativa del personal de la dependencia.

Del total de cadáveres que estaban en la morgue sin identificación, 162 tienen rastros de haber sido víctimas de feminicidio, homicidio o muerte violenta, en 62 no se ha determinado la causa del fallecimiento, 47 se encontraban sin autopsia y el resto fallecieron por diversas causas.

El director del IJCF dio a conocer que detectaron indicios y desorden en el proceso de dictamen pericial de la morgue, además de un rezago de tres años en la generación de dictámenes y que se dejó de tomar las huellas dactilares durante un año.

Asimismo, se constató falta de control en los ingresos de los cuerpos, a los que no se asignaba un número único de identificación, además de falta de registros administrativos para el control de las muestras genética procesadas.

Reveló que se han iniciado procesos administrativos a empleados de la dependencia de las áreas de genética y trabajo social para sancionarlos por las omisiones en la entrega de perfiles genéticos, además de que se abrió investigación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos para fijar responsabilidades en diversas áreas. 

JMSJ