Foto: Cuartoscuro | Archivo El recién designado tesorero fue agredido a balazos al salir de su casa  

La Fiscalía General del Estado (FGE) de Guerrero investiga la agresión a balazos que sufrió el tesorero del Ayuntamiento de Coyuca de Catalán, Cuauhtémoc Mastachi -quien forma parte del gabinete del perredista Eusebio Echeverría Tavares-, cuando salía de su domicilio en Ciudad Altamirano.

De acuerdo a testigos, el servidor público municipal recibió un impacto de bala en el brazo derecho, por lo que fue trasladado a un hospital privado de Ciudad Altamirano para su atención médica, mientras que las autoridades implementaron operativos de búsqueda para dar con los agresores, sin resultados favorables.

El vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, comentó que el Ministerio Público no ha logrado entrevistar al tesorero, pues está a la espera de que los médicos lo autoricen.

Por su parte, el presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la entidad, Heriberto Huicochea, condenó el suceso: “Esperemos que no tenga que ver con el tema poselectoral, es muy lamentable lo que está ocurriendo”.

El priista solicitó a las autoridades que se esclarezca cuáles fueron los factores del atentando y recordó que el 8 de mayo pasado falleció Abel Montufar Mendoza, candidato del PRI a ese municipio.

“El presidente actual de este municipio –Echeverría Tavares- era un regidor del PRI, él tenía aspiraciones a ser el candidato, desafortunadamente por todos los acontecimientos que se dieron se fue haciendo una contienda compleja y el ya no fue nuestro candidato, compitió en contra de nosotros y resultó ganador”, manifestó en una entrevista con 24 HORAS.

De acuerdo a la Consultora Etellekt, del 1 de septiembre de 2017 al 31 de agosto de este año, se han contabilizado al menos 850 agresiones en contra de políticos; de éstas, 175 han sido asesinatos.

Armas extraviadas

Por otra parte, el Grupo de Coordinación Guerrero señaló que el presidente municipal de Acapulco, el perredista Evodio Velázquez Aguirre, no justificó la ausencia de 342 armas perdidas de la Policía local, pues sólo informó que 271 estaban amparadas por una averiguación y que 71 siguen extraviadas.

El encargado de despacho de la SSP municipal presentó únicamente copias simples para avalar sus dichos, por lo que la información proporcionada deberá ser corroborada por la Procuraduría General de la República y la Fiscalía.

LEG