Una activista de San Petesburgo (Rusia) virtió lejía (líquido corrosivo y transparente de olor muy fuerte)  en las piernas de los hombres que viajaban sentados con las piernas abiertas en el metro.

 

Anna Dovgaliuk decidió actuar contra los hombres que practicaban el Manspreading, la acción de sentarse con las piernas abiertas y ocupar el espacio de otro pasajero.

 

“El ‘manspreading’se trata de una falta de respeto público hacia las mujeres y niños y es una vergüenza para la sociedad”, dijo en el video que compartió en sus redes sociales.

 

Con la ayuda de una conocida, la joven grabó un video en donde se observa como aproximadamente a 70 hombres se les derrama el liquido en un metro de San Petersburgo.

 

La mujer informó que realizará la misma campaña en otras partes de Rusia como en Moscú y Kazán.

 

La grabación ha provocado diferentes reacciones en redes, la mayoría son de hombres indignados que explican la postura de piernas abiertas para la fisiología masculina, otros amenazan a la activista con acciones físicas o legales.

 

El video ha causado impacto en las redes ya que la acusan de querer ganar popularidad ya que señalan que la protagonista no viaja en metro.

 

DPC