Foto: Especial Las tormentas solares, de acuerdo con la NASA, pueden interrumpir redes de energía, comunicaciones y provocar auroras  

La tormenta solar pronosticada para hoy por el Laboratorio de Astronomía de Rayos X del Sol de Rusia, es un evento común durante el ciclo solar y no debe causar alarma, aseguró el jefe del Laboratorio Nacional de Clima Espacial de la UNAM, Juan Américo González Esparza.

“Lo anunciado por el laboratorio ruso es algo que está ocurriendo cada 27 días. Es una interacción de las partículas del viento solar con la atmósfera de la Tierra con efectos menores, y no debemos preocuparnos”, comentó.

El aviso de los científicos rusos, difundido hace unas semanas, advertía que la tormenta tenía la categoría G1 y podría causar efectos físicos en las personas, como dolores de cabeza, nerviosismo, irritabilidad, agotamiento, o ansiedad.

Como eventos normales, definió el investigador de la UNAM las tormentas solares, ya que si fuera un huracán, éstas serían de categoría uno, la más baja en la escala, al provocar daños menores.

“No estamos hablando de una tormenta solar intensa, se trata de una continua relación entre el Sol y la Tierra. En México, los efectos van a ser prácticamente imperceptibles”, explicó.

González Esparza describió que el viento solar es provocado por el flujo continuo de partículas, las cuales se encuentran en la atmósfera caliente del sol y no pueden ser contenidas por la fuerza gravitatoria de la estrella.

“Todos los planetas estamos inmersos en la atmósfera del Sol en expansión, y estamos conectados con lo que ocurre en su atmósfera”, apuntó.

A pesar de que la Tierra tiene un campo protector que impide la entrada de las partículas del viento solar a la atmósfera, esta coraza magnética se puede abrir por algunas horas, para permitir la entrada de estas partículas, y formar las auroras boreales.

LEG