Foto: Reuters/archivo Desde la llegada de Tom Brady a los Patriots, la franquicia de Nueva Inglaterra tiene marca de 27 triunfos por 10 descalabros, con cinco trofeos Vince Lombardi en sus vitrinas  

Cuando dicen que Tom Brady ya no está para dirigir una ofensiva, que no es capaz de mantener el nivel de los últimos 17 años, es muy complicado dar argumentos sólidos para que la afición, de Patriots o no, crea que el quarterback ya no es el arma confiable que ganó cinco Super Bowls.

Pero no todo el mérito es del 12 de Nueva Inglaterra, debe ser compartido con el entrenador en jefe Bill Belichick. La dupla pasador-entrenador ya demostró que la NFL está a sus pies y cuando el quarterback se encuentra sano, es muy complicado que alguien les haga sombra, y mucho menos en su División.

Hablando del sector en el que radica Nueva Inglaterra, los rivales Dolphins, Bills y Jets pasan por momentos de incertidumbre, y no se ve como los puedan incomodar en los 16 encuentros de la campaña regular.

Por más cambios que hace la gerencia de los Patriots en el cuerpo ofensivo que acompaña a Tom Brady, no ocurre nada relevante, y al contrario, mantienen el nivel que los llevó a ganar su División 15 años en el presente milenio.

Miami tiene un arma secreta, a Danny Amendola, quien fue uno de los más fieles soldados de Brady. El receptor abierto siempre responde cuando se le requiere, así que el mariscal Ryan Tannehill tendrá siempre a un velocista, y que le puede salvar en muchas dificultades.

Las casas de apuestas dan como máximos favoritos a los que juegan en el Gillette Stadium, y la razón está con ellos, pues su nómina es excelente, y tienen la espinita clavada de la derrota del Super Bowl LII contra Filadelfia. Por la edad de Brady, se antoja complicado que después de esta campaña, mantenga el nivel tan alto, así que es ahora o nunca.

División extraña, pues no se ve mucha competencia, aunque las sorpresas pueden llegar, y no se puede dar por sentado que Nueva Inglaterra ganará. Lo ideal sería que la competencia crezca y haya un nuevo campeón divisional.

LEG