Foto: Reuters/archivo 3 Supercopas de Europa tiene el Atlético de Madrid; es el cuarto equipo más ganador de este trofeo junto al Liverpool  

Ya sonaba más que apetecible el encuentro que tuvo como sede a Estonia, país que carece de exponentes de primer nivel en las contiendas internacionales, pero que su pasión por el futbol no desmerece, y menos, cuando se trata de un derbi que define al mejor equipo de Europa.

Apenas se dio el silbatazo inicial y no pasaron más que instantes para que el primer rugido en la Arena Le Coq apareciera. Diego Costa se armó una jugada individual fantástica, una de las que le sirvieron en un inicio para ganarse a la afición rojiblanca y que lo llevaran a la Selección de España.

Ramos y Varane fueron las víctimas que el hispano-brasileño dejó en el área grande para sacar después un disparo que Navas no pudo contener, a pesar de que Costa prácticamente no tenía ángulo para disparar.

De a poco el Real Madrid emparejaba el juego con los embates que se hicieron más continuos en el área de Oblak. Fue en el minuto 27 cuando Benzema remató sólido frente al arco colchonero un gran servicio de Bale desde la banda derecha. El empate trajo nuevas emociones.

Ya en el segundo periodo, una desconcentración de Juanfran que concluyó con una mano suya en propia área le dio la oportunidad a los merengues de tomar la ventaja por la vía penal. Sergio Ramos no desaprovechó y marcó el segundo para los blancos.

Los fantasmas de 2014 y 2016 parecían volver para el Atlético, así lo reflejaba el rostro de su afición, sin embargo, Costa, otra vez Costa le devolvió el aire a los suyos. Ahora las fallas eran del lado de los merengues. Marcelo tuvo un error en la salida que aprovechó Juanfran que conectó con Correa y finalizó Costa para la igualada.

Las cosas permanecieron igual hasta el final de los 90 minutos. La prórroga aguardaba para una definición
El gol más hermoso de la noche fue firmado por Saúl a los 98 minutos. Un error de Varane dejó el balón sin dueño para que el 8 del Atleti rematara una volea impecable que no se detuvo hasta encontrar el ángulo superior izquierdo del arco defendido por Navas.

Seis minutos después Koke sentenció el encuentro con el 4-2 definitivo. A pesar de que el Madrid no paró de presionar hasta el silbatazo final, nada pudo hacer para revertir lo que sus vecinos obtuvieron merecidamente.

Dato

El primer gol de ayer en la Supercopa de Europa, obra de Diego Costa, es la anotación más rápida en la historia de esta competencia; 49 segundos es ahora el tiempo a vencer para el futuro

Adiós racha. Real Madrid terminó con una marca que tenía desde 2001 al no perder ninguna final internacional; la última caída fue en 2000 ante Boca Juniors por la Copa Intercontinental

Complicado inicio. Julen Lopetegui empezó con goleada su mando en partidos oficiales con el Real Madrid; los merengues nunca permitieron cuatro goles en un partido con Zidane como entrenador.

LEG