Luego de cinco años y medio de permanecer procesada por los delitos de delincuencia organizada y lavado de dinero por mil 978 millones de pesos provenientes del Sindicato Nacional de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo Morales fue absuelta y puesta en libertad de manera inmediata.

Su liberación y su captura no pueden entenderse de otra manera que no sean por cuestiones políticas. Desde el inicio de la llamada reforma educativa, Elba Esther Gordillo Morales se opuso tajantemente a apoyar la propuesta del presidente Enrique Peña Nieto, pero también tenemos que tomar en cuenta que el distanciamiento de la profesora con el Gobierno federal tuvo mucho que ver con el apoyo que ésta le dio a Eruviel Ávila.

Justo en su última aparición, la ex dirigente sindical explotó contra la figura presidencial por dos motivos; ese día la Cámara de Diputados aprobó por mayoría de votos la llamada reforma educativa y la segunda fue porque en pleno cumpleaños enviaba un recado a Peña Nieto a través de Eruviel Ávila.

“Doctor Eruviel Ávila, por favor, transmita al señor Presidente que los maestros de México somos sus amigos, lo hemos sido siempre y lo seguiremos siendo por el bien de la patria”, afirmó.

La reunión entre Eruviel Ávila y la dirigencia sindical encabezada por Elba se realizó en un contexto muy característico: las versiones insistentes en el Estado de México de un distanciamiento entre Ávila y Peña Nieto a raíz de las designaciones de integrantes del gabinete estatal.

Ese día, Elba Esther Gordillo no aguantó, y acompañada del gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila, los maestros de la Sección 36 del SNTE y el secretario general ejecutivo, Juan Díaz de la Torre, señaló: “Ni amenazas ni nada me van a intimidar. Para morir nací. Quiero morir con un epitafio: ‘Aquí yace una guerrera; como ‘guerrera’ murió’”.

Veintiún días después era detenida presuntamente por haber desviado casi dos mil millones de pesos del sindicato a sus bolsillos.
Pocos recuerdan que la profesora ya se había enfrentado a Peña en 2011 cuando ésta se impuso para que Eruviel Ávila, actual mandatario estatal, fuera el sucesor de Peña.

Cinco años después de su captura, Elba sale libre, cuando en realidad pudieron liberarla desde hace más de dos años, justo cuando declaró ante el juez María Sanjuana Cerda Franco, ex integrante del Colegiado de Administración y Finanzas del Sindicato.

Su declaración determinó que los recursos obtenidos por Elba a través de la SNTE eran lícitos, pues aseguró que los depósitos que le cuestionan a la ex lideresa magisterial son en realidad una práctica legal autorizada para hacer pagos, algo así como usos y costumbres en el sindicato.

Los dos últimos años, Elba Esther sufrió constantes negativas a ser trasladada a su domicilio; ya en la prisión domiciliaria se le negaron visitas, y aun así logró operar mediante su gente tanto las elecciones del Estado de México como los comicios presidenciales pasados.

Elba Esther Gordillo, sin duda, tiene mucho por recuperar, y uno de sus objetivos no sólo será el poder, sino recuperar el Sindicato Nacional de la Educación.