Foto: Reuters/Archivo “Nuestro país no recibirá en su territorio a ninguna comisión especial, grupo de trabajo, o como se quiera llamar"  

La Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó ayer la creación de un grupo de trabajo para Nicaragua, cuya tarea será apoyar el diálogo nacional y designar una misión que visite el país, a fin de contribuir a la búsqueda de soluciones pacíficas para la crisis, la más sangrienta desde los años 80 del siglo pasado.

La formación de “grupo de trabajo” recibió el aval de 20 de los 34 países que son miembros activos de la OEA, lo que muestra una seria preocupación del continente americano sobre Nicaragua.

No obstante, el ministro nicaragüense de Asuntos Exteriores, Denis Moncada, expresó su oposición y anticipó que su Gobierno no va a permitir que llegue ningún grupo de trabajo creado por el Consejo Permanente de la OEA.

En Nicaragua, el obispo auxiliar de la arquidiócesis de Managua, Silvio Báez, agradeció a la OEA su voto en apoyo a una solución pacífica a la crisis de Nicaragua, que ya ha cobrado entre 317 y 448 muertos desde abril, según distintos conteos de ONGs.

Báez, uno de los personajes más influyentes del país centroamericano y es miembro de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, que actúa como mediadora y testigo en el diálogo nacional para resolver la crisis, por invitación de Ortega, que ahora busca desacreditarla.

LEG