Foto: Captura de video Pese a la situación de violencia que se vive en Afganistán, el gobierno sueco clasifica a dicho país como un lugar seguro y tiene como norma deportar a los afganos que les fue rechazada la solicitud de asilo.  

Una joven estudiante y activista sueca de nombre Elin Ersson, salvó a un inmigrante afgano de ser deportado al rehusarse a salir de su vuelo.

El proveniente de Afganistán iba a ser trasladado el pasado lunes a Turquía para de ahí ser llevado a su país natal,  así que la joven compró un boleto de avión y se negó a sentarse en el lugar correspondiente hasta que el inmigrante la acompañara.

A través de sus redes sociales, Ersson transmitió en vivo lo que sucedía, en medio de la polémica con otros pasajeros; pues a pesar de que hubo algunos que apoyaban a la estudiante, había muchos otros que alegaban que perdía su tiempo.

La activista era consciente de que bastaba con una persona de pie, para que el vuelo no prosiguiera, así que explicó que ella sólo quería evitar la deportación y posteriormente se iría a su lugar.

“Hago lo que puedo para salvar la vida de una persona”, decía a los otros pasajeros y a sus seguidores; pues se trata de un país donde el hombre al que defiende “probablemente sería asesinado”.

En el video se aprecia como la tripulación, como otros pasajeros ordenaban a la joven que se sentara, sin embargo, la acción de la joven activista provocó que los demás espectadores comenzaran a pararse.

Al final, su breve protesta tuvo como resultado que la joven y el afgano de 52 años fueran evacuados del avión.

 

Pese a la situación de violencia que se vive en Afganistán, el gobierno sueco clasifica a dicho país como un lugar seguro y tiene como norma deportar a los afganos que les fue rechazada la solicitud de asilo.

 

JMSJ