Foto: Especial La construcción de la macroterminal para almacenaje de gasolina que se construirá en la zona conurbada del Valle de México  

La construcción de la macroterminal para almacenaje de gasolina que se construirá en la zona conurbada del Valle de México se perfila como un sitio estratégico para el suministro de combustible en el país, la cual se espera entre en operaciones en el año 2020.

Edgar Gutiérrez Peláez, subdirector general de la empresa Hydrocarbon Storage Terminal (HST), dijo el proyecto que habían anunciado el año pasado aumentó, ahora se pasó de tener una capacidad de 330 mil barriles a 875 mil barriles de combustible, además de que aprovechará la oportunidad de la cercanía donde se construye el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) para incluir depósitos para almacenar turbosina.

En una entrevista con 24 HORAS, el directivo explicó que la ampliación se dio luego de que la empresa española CLH adquiriera 60% del capital de la compañía mexicana HST, con el objetivo de desarrollar este proyecto de construcción que se llevará a cabo en el municipio de Acolman, Estado de México, en una superficie de 7.6 hectáreas.

El año pasado, este matutino informó sobre el inicio de la construcción de este megaproyecto, el segundo más grande en su tipo en el país –tan sólo superado por la terminal de almacenamiento de Pemex ubicado en la delegación Azcapotzalco, en la Ciudad de México con una capacidad aproximada de un millón 50 mil barriles-, pero a pesar de que la empresa ya había obtenido todos sus permisos para hacerla, decidieron esperar un poco más.

Explicó que por esa razón, a pesar de que desde marzo de 2017 ya tenían todos los permisos para empezar con la construcción, optaron por esperar un año más y rehacer su proyecto, lo que implicó que actualizarán sus permisos en febrero de este año.
Gutiérrez Peláez aseguró que a lo largo de todo 2017 no fue tiempo perdido, debido a que se dedicaron a buscar un socio y lograron un acuerdo comercial con la segunda empresa más grande de almacenamiento de combustible en Europa, la española CLH.

De esta manera, la asociación entre las dos compañías se dio el 4 de abril pasado, con 75% de la terminal comprometida. Explicó que para la primera semana de agosto saldrán la petición de oferta de los constructores, es decir elegirán a las constructoras que lleven a cabo este megaproyecto con las especificaciones operativas, la ingeniería y el modelo de contrato.

Reservas

Con este megaproyecto lo que se busca es tener una central de almacenamiento de 875 mil barriles, equivalente a 130 millones de litros de combustible; en México la demanda diaria de consumo de gasolina es de 190 millones de litros
“Si esta terminal está llena tienes como 14 horas de inventario a nivel nacional. Es una terminal muy grande y sí ésta se proyecta como creemos, va a poder hacer la entrega de 4% de la gasolina a nivel nacional”, dijo.
Expresó que buscarán convertirse en el centro de distribución de turbosina del NAIM, es decir hacer un ducto de 6 o 7 kilómetros para alimentar a la nueva terminal aérea del combustible para la operación de los aviones.

Y esto, porque su socio español opera en Panamá el mantenimiento, la granja de tanques y el llenado de los aviones en el aeropuerto de la capital de ese país. “Con nuestro socio podemos ir en consorcio y buscar mandar turbosina al NAIM”.

 

Juan Ángel Espinosa

 

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