Foto: Especial Se exige tener maestros profesionales y mucho más preparados; ofrecer mejores contenidos; contar con mejores y más modernos espacios físicos y materiales didácticos pertinentes  

En México, como en todo el mundo, las reformas educativas requieren convertirse en una política de Estado, y exigen ser defendidas ante la mezquindad de los intereses políticos o electorales, manifestó  Otto Granados Roldán, secretario de Educación Pública (SEP).

 

Al participar en la 204a sesión del Consejo Consultivo de la UNESCO, dijo que esos cambios necesitan el tiempo y el apoyo sostenido, decidido y responsable de los principales actores públicos y privados, porque en su continuidad, está depositada la esperanza de millones de mexicanos.

 

En la reunión, en la que ratificó el apoyo del Gobierno mexicano a la señora Audrey Azoulay como directora general de la UNESCO, para fortalecer el tejido espiritual que proveen la educación, la ciencia y cultura, el funcionario explicó que en México, con uno de los 10 sistemas educativos más grandes del mundo, ha emprendido, con el liderazgo del presidente Enrique Peña Nieto, la reforma más ambiciosa en las últimas cinco décadas,  como se estableció en los Objetivos de Desarrollo del Milenio y en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

 

Comentó que para ello se exige tener maestros profesionales y mucho más preparados; ofrecer mejores contenidos; contar con mejores y más modernos espacios físicos y materiales didácticos pertinentes, y enseñar en la diversidad y el respeto absoluto a quienes ven y viven el mundo de manera distinta y diversa.

 

Precisó que con esto se busca, formar, en suma, a un genuino ciudadano del mundo que sea “un cúmulo de flujos y corrientes” (E. W. Said).

 

“Como secretario de Educación de mi país celebro que, a cinco años de iniciada la Reforma Educativa, México avanza de manera firme hacia esos objetivos:

 

Tan solo el año pasado, 626 mil maestros fueron capacitados en diversas disciplinas curriculares y pedagógicas, este año llegaremos a un millón 200 mil; estamos invirtiendo cerca de 4 millones de dólares diarios para mejorar la infraestructura de 33 mil escuelas en las que estudian seis millones de alumnos, principalmente en las regiones de mayor rezago y comunidades indígenas; casi 190 mil maestros han sido contratados o ascendidos mediante evaluaciones y concursos basados en el mérito; la tasa de analfabetismo bajó de más de 6 por ciento a casi 4 por ciento en estos años, y en agosto próximo pondremos en marcha el Nuevo Modelo Educativo con  nuevos planes y programas centrados en los aprendizajes claves y nuevos libros de texto gratuitos, dentro de los que se incluyen, por primera vez de manera sistemática y como parte del nuevo currículo, libros en 22 lenguas indígenas que favorecen el multiculturalismo y la inclusión”, explicó.

 

Expresó que los innegables progresos en el campo de la ciencia, la educación, la innovación y el desarrollo tecnológico, conviven, sin embargo, con el resurgimiento de nacionalismos exacerbados, fanatismos de toda clase y manifestaciones variadas de odio, inequidad y exclusión social.

 

TFA