En las primeras semanas del año le daba a conocer que en el mercado hipotecario estaba llamado la atención el comportamiento del área hipotecaria de BBVA Bancomer, a cargo de Marco Zamudio, como administrador de un fideicomiso que contiene una importante cartera de créditos hipotecarios, causa por la que fue demandado por la vía ordinaria mercantil en el Juzgado Vigésimo Octavo de lo Civil de la Ciudad de México. La cuestión es que se ha adueñado unilateralmente de inmuebles adjudicados relacionados con dichos créditos, sin tomar en consideración a otros agentes financieros participantes en el fideicomiso. La demanda solicita el pago equivalente a los inmuebles que ha transferido ilegalmente, así como la aportación de garantías para evitar que continúen con esa práctica abusiva y la reparación de los daños ocasionados. Pues resulta que el banco ha solicitado, ante un juez que lleva el caso, desconocer la personalidad jurídica del abogado a cargo de la demanda por afectar al fideicomiso. Sin embargo, les sentenciaron infundado el recurso de apelación a los defensores de Bancomer, por lo que el proceso continúa a efecto de obligar al banco que preside Luis Robles a resarcir el daño económico y financiero causado al fideicomiso.

Enojo automotriz

En el sector automotriz siguen causando mucho enojo las palabras del candidato de la coalición Todos por México, José Antonio Meade Kuribreña, quien en un acto de campaña planteó la posibilidad de regularizar vehículos ilegales, conocidos como “chocolates”. Por lo que la respuesta del sector es que estarán en contra de cualquier modalidad de regularización, matriculación o censo para vehículos introducidos ilegalmente al país, ya que sólo convertiría en un pervertido incentivo a la ilegalidad y preservación de impunidad. Y es que resulta que a raíz de las palabras del abanderado priista, han llegado de ciudades del Norte más vehículos procedentes de la Unión Americana con la esperanza de ser regularizados. La petición es que no hagan promesas que sólo alborotan el avispero e incitan a la corrupción.

Chapulineo político 

Juan Carlos Romero Hicks, quien fue gobernador de Guanajuato y actualmente es senador de la República, quiere entrarle al “chapulineo”. Ha iniciado su campaña para diputado federal por el Distrito IV de su entidad. Todo sin soltar la senaduría. Y aunque por ley no está obligado a renunciar, se trata de una cuestión de ética. Su cargo nos cuesta un millón 973 mil pesos netos anuales, además de los recursos y asesorías que maneja como presidente de la Comisión de Educación, y es un hecho que no está enfocado al cien por ciento en el puesto que ostenta, sino en su futuro cargo político.

Voz en Off

Los gremios empresariales del país deben aprender de la Asociación de Bancos de México que preside Marcos Martínez Gavica, que dio a conocer que entregará al próximo Presidente electo el Plan Estratégico del sector, con el fin de mantener y acelerar el compromiso de la banca con el país y la sociedad. La cúpula empresarial del país está viviendo una profunda crisis y ha olvidado la finalidad para la que fue creada, desgastando su prestigio en debatir con quien aún no ha sido elegido para los próximos seis años…

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JNO